Ante la dificultad que más de 3.5 millones de ejidatarios del país tendrán para emitir facturas electrónicas, al aplicar desde este martes las nuevas disposiciones fiscales, millones de contribuyentes rurales se refugiarán en la informalidad.

 

El presidente de la Unión Nacional de Organizaciones Solidarias y Economía Social (UNIMOSS), Javier Eduardo López, dijo que ante la imposibilidad real de incorporación a las nuevas disposiciones fiscales, el medio rural caerá en la informalidad y quienes intenten cumplir con estas reglas hacendarias podrán ser “presa fácil” de la policía fiscal que actualmente es el Sistema de Administración Tributaria (SAT).

 

“El rentismo, el coyotaje, la invasión de tierra productiva y el abandono de la misma por parte de las nuevas generaciones y de las jefas de familia, será el nuevo tamizaje de la Reforma Fiscal en el campo mexicano”, advirtió López en un comunicado.

 

El dirigente social, reiteró que en el estado de Tamaulipas hay productores dueños de 10 hectáreas que ya procedieron a rentar sus tierras ante el impedimento de incorporarse al nuevo esquema fiscal.

 

De acuerdo con la UNIMOSS, 94% de los municipios rurales del país carecen de una sucursal bancaria, contadores y acceso a Internet.

 

Javier López Macías, insistió en la urgencia de que las secretarías de Agricultura y de Economía, así como el SAT y la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente, instalen mesas de trabajo con los representantes del sector primario a fin de encontrar una salida a esta problemática o, en caso contrario, “la informalidad ahora también se verá en el campo”.