MADRID. Tocaba el turno del presidente español; Mariano Rajoy, de presentarse en las Cortes españolas (Congreso) para protagonizar el debate sobre el estado de la nación. Frente a él, el opositor, líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba. Del encontronazo emergió el antagonismo que se ensancha: dos visiones de una misma España o, si se prefiere, dos Españas opuestas entre los principales líderes políticos.

 

Mariano Rajoy resumió los nuevos tiempos económicos en España con ocho palabras cargadas de simbolismo: “Hemos atravesado con éxito el cabo de Hornos”, como si la economía fuera un buque que sortea uno de los pasos marítimos más peligrosos del planeta.

 

El presidente español elevó a 1% del Producto Interno Bruto la previsión de crecimiento para 2014, con respecto al 0.7% estimado inicialmente, y dijo que la economía repuntará 1.5% en 2015.

 

Tras poco más de dos años en el poder marcados por una furibunda crisis económica y de deuda y una durísima agenda de recortes, Rajoy afirmó que España ha alcanzado un punto de inflexión y anunció rebajas progresivas de impuestos y nuevos incentivos a la contratación para combatir el rampante desempleo, todavía en 26%.

 

No detalló el alcance ni los beneficios de la reforma, pero anunció que los empleados con sueldos inferiores a 12 mil euros al año quedarán exentos del impuesto sobre la renta, que ahora pagaban a un interés muy marginal.

 

“España era un lastre para Europa y hoy se la percibe como parte del motor”, dijo Rajoy en el discurso anual sobre el estado de la nación en el Parlamento. “No es el final del esfuerzo, no hemos alcanzado la meta, pero antes la teníamos a la espalda y ahora la tenemos delante”.

 

Por su parte, Alfredo Pérez Rubalcaba, acusó al presidente de esgrimir la crisis como excusa para desmantelar el estado de bienestar con recortes laborales, sanitarios y educativos; trató de desmontar el tono triunfalista de Mariano Rajoy.

 

“Ha hecho usted lo que nunca se atrevió a plantear con la excusa de la crisis. “¿En qué país vive usted, señor Rajoy?”, preguntó Pérez Rubalcaba criticando la visión del gobierno.

 

El tema social no podía dejarlo atrás Rubalcaba: “Usted ha recortado los gastos sociales, ha hecho que los pensionistas paguen por sus medicamentos y usted ha acabado con la justicia gratuita, y eso le llaman ir por buen camino”.

 

El presidente Rajoy calificó como “apocalíptico” la participación de Rubalcaba.

 

Sobre el desmontaje que propone el Partido Popular (PP), al que pertenece Rajoy, de la política del aborto que heredó del PSOE, Rajoy no mencionó nada. Respecto a la intención que tiene el presidente autonómico de Cataluña, Artur Mas, de someter a una consulta la decisión de independizarse de España, Rajoy fue enfático al decir que la consulta no se llevará a cabo porque no sería legal.