La transición del Instituto Federal Electoral (IFE) al Instituto Nacional Electoral (INE) se deberá lograr de manera ordenada, para garantizar que las elecciones federales de 2015 se realicen en tiempo y forma, plantearon los cuatro consejeros electorales a la Cámara de Diputados.

 

“Los servicios que el IFE le brinda a la ciudadanía y a los partidos, así como los procesos en curso se vendrán realizando puntualmente, de modo tal de hacer una transición del IFE al INE lo más ordenada, transparente y sin sobresaltos posible”, informó el consejero presidente, Lorenzo Córdova.

 

A petición de los consejeros Córdova Vianello, María Marván Laborde, Marco Antonio Baños Martínez y Benito Nacif Hernández, ayer los siete coordinadores parlamentarios se reunieron con los funcionarios para platicar sobre la reglamentación secundaria en materia de la reforma política.

 

“Promovimos la colaboración técnica del IFE que, como ustedes saben, ha venido desarrollando nueve procesos electorales prácticamente sin contratiempos, de modo tal que en el proceso legislativo que se detona en estos próximos meses, y que debe de concluir, de acuerdo con los transitorios de la reforma constitucional, el 30 de abril próximo (…), que el IFE pueda ser consultado cuando así lo dispongan los legisladores para atender dudas”, dijo.

 

Subrayó que los consejeros en funciones están convencidos de cerrar el ciclo de vida institucional del IFE para que “nazca bien” el ciclo de vida institucional del INE “en el entendido que esto implica una corresponsabilidad de los legisladores, por un lado, de los actores políticos y de los partidos, por otro, pero también del IFE, y haremos lo que nos toque mientras estemos en el encargo”.

 

Los consejeros recordaron que el próximo año habrá elecciones federales intermedias y, adicionalmente, comicios locales en 17 entidades, de los cuales en nueve se renovarán gubernaturas.

 

Por ello urgieron a los legisladores a expedir las leyes complementarias que habrán de normar los procesos electorales y confiaron en que el Congreso de la Unión resuelva en esa etapa las dudas, imprecisiones e incluso contradicciones existentes en la reforma constitucional.

 

Grupo elegirá a los 11

 

Tras concluir la reunión, sostenida a interior del recinto legislativo, la consejera María Marván Laborde explicó que será un grupo interdisciplinario quien elija a los 11 nuevos consejeros del INE.

 

“El consejo será conformado por siete personas, tres nombrados por la Junta de Coordinación Política (Jucopo), dos por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y dos más por el Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos”.

 

Explicó que la decisión de que los cuatro actuales consejeros se integren al nuevo INE será una “decisión personal, quienes quieran someter su candidatura al proceso (…) no se habló nada de quiénes serían los consejeros ni mucho menos”.

 

En este sentido, el consejero Benito Nacif rechazó que los integrantes del Consejo General del IFE acudieran a San Lázaro a solicitar su ratificación como integrantes del nuevo organismo electoral. Por el contrario, acudieron a ofrecer la experiencia y el conocimiento acumulado de la institución para acompañar el debate de la legislación secundaria.

 

Recalcó que de acuerdo a la reforma política-electoral, existe una definición de procedimientos de cómo renovar a los integrantes del nuevo órgano y la obligación del IFE es generar una “plataforma de lanzamiento”.

 

En la reunión a puerta cerrada acudieron los diputados federales Silvano Aureoles Conejo, presidente de la Junta de Coordinación Política, Manlio Fabio Beltrones Rivera (PRI), Arturo Escobar y Vega (PVEM), Lilia Aguilar Gil (PT), Ricardo Mejía Berdeja (Movimiento Ciudadano) y María Sanjuana Cerda Franco (Panal), así como el secretario de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah Gebara.

 

Los cambios en proceso

 

La reforma política-electoral cambió las funciones de las autoridades electorales federales y las dividió en ocho apartados: semicentralización de elecciones locales, cambios en la conformación del consejo general del INE y de los órganos estatales, atracción de comicios cuestionados, fiscalización de recursos de campaña, democracia partidista, pago a proveedores y educación cívica.

 

Modelo semicentralizado del INE

Aunque mantendrá la facultad de organización y realización de los comicios federales, el INE trabajará de forma conjunta con los institutos electorales locales para las elecciones en estados y municipios.

 

Facultad de atracción

El INE podrá atraer “cualquier asunto de la competencia de los órganos electorales locales cuando su trascendencia así lo amerite o para sentar un criterio de interpretación”.

 

Composición del INE

El Consejo General del INE estará conformado por un consejero presidente y 10 consejeros electorales (dos más que en el IFE), mismos que durarán en su cargo nueve años y no podrán ser reelectos.

 

Designación de consejeros locales

El Consejo General del INE tiene la facultad de designar y remover a los consejeros electorales de las entidades. Los órganos locales estarán conformados por un consejero presidente y seis consejeros electorales.

 

Fiscalización de recursos

En el INE se eliminó la Unidad de Fiscalización y sus funciones fueron absorbidas por el Consejo General del INE, quien no estará limitado por los secretos bancario, fiduciario y fiscal, y contará con el apoyo de autoridades federales y locales.

 

Organizar comicios partidistas

El INE tiene la facultad de que, si los partidos políticos así lo solicitan, pueda organizar las elecciones de los dirigentes partidistas, para lo cual se utilizarán las prerrogativas de los partidos.

 

Pago a proveedores de partidos

El INE se encarga de realizar pagos a proveedores y prestadores de servicios de los partidos a petición de éstos, facultad que antes recaía en los institutos políticos.

 

Educación cívica

La reforma aprobada transfiere las labores de educación cívica de manera exclusiva a los institutos locales. Lo anterior se refiere a todas las actividades que deben realizarse para la “construcción de ciudadanía”, tales como la invitación a la participación política o a emitir el voto.