La Procuraduría General de la República (PGR) indaga a los perros que utiliza la Policía Federal para la detección de drogas en el aeropuerto de la Ciudad de México, ante la posibilidad de que el narcotráfico los hubiera penetrado.

 

Esta es una de las líneas de investigación que iniciaron las autoridades ministeriales y en las que colabora la Comisión Nacional de Seguridad, ante la posibilidad de que los animales pudieran haber sido sustituidos o que no se estén cumpliendo las normas de descanso o entrenamiento que permitan que los animales, adiestrados con las técnicas más avanzadas, puedan detectar cargamentos de cocaína en la terminal aérea.

 

Es por eso que los 27 perros de la Policía Federal destinados al Aeropuerto capitalino, revelaron fuentes de primer nivel del gobierno federal, están bajo investigación por parte de la PGR, los cuales cubren los tres turnos de revisión y, cada uno, está asignado a un agente  de la Policía Federal.

 

Y es que las sospechas comenzaron el domingo pasado, cuando llegó un vuelo procedente de Buenos Aires Argentina, con escala en Lima, Perú, arribó con una maleta sospechosa, la cual revisó uno de los perros y no reportó alguna anomalía.

 

Esa maleta se la habían sembrado al contador Ernesto de la Torre Carbajal, quien al reclamar su equipaje se percató que su maleta había sido cambiada por otra en la que se encontraron más de 24 kilos de cocaína.

 

Uno de los perros entrenados había revisado el equipaje antes de ser entregados a sus propietarios, pero no detectó nada. Cuando la maleta había sido aislada, el perro la olfateó varias veces sin mostrar señales de que contenía algo extraño.

 

“No se sentó en ella ni hizo tuvo alguna reacción como las que conocemos para  generar una alerta” dijo Rodrigo Higuera, abogado de De la Torre.

 

Pero como ya existían las dudas pues Ernesto de la Torre decía que esa maleta, con clave de identificación LA001589, no era la suya, se pidió su permiso para abrirla y revisarla.

 

Así se descubrió que contenía 24 paquetes de cocaína que estaban en el fondo de la maleta, y encima de ellos había una cobija y una almohada, las cuales, fueron rociadas con un químico que despedía un olor penetrante que aparentemente impedía verificar el rastro.

 

De acuerdo a los primeros informes, el perro tampoco detectó el olor de la droga cuando se retiró la almohada y la colcha, lo que podría significar, explicó una fuente del gobierno o que el olor fue tan penetrante que le impidió seguir olfateando o “es un agente canino que de forma irregular no puede cumplir con su función”.

 

Fue hasta que llegó con los perros de la PGR, explicó el litigante, el que detectó la droga inmediatamente.

 

No es el único caso

 

Tan solo esta semana, como este diario ha podido corroborar, se detectaron tres casos de maletas con droga provenientes de vuelos de Lima que fueron descubiertas en las revisiones con los escáneres o manuales, pero no fueron ubicadas en las cintas magnéticas donde se utilizan a los perros.

 

En el caso de la mexicana que fue detectada el lunes pasado en la Terminal Uno con la droga en compartimientos ocultos de sus dos maletas, también libró los perros de revisión, pero su equipaje fue revisado en el filtro de rayos X y por eso se descubrió que había paquetes escondidos con la droga.

 

DATO

En el aeropuerto las dependencias que cuentan con este tipo de agentes caninos son Aduanas, PGR, Senasica y Sagarpa.

 

 

Urge investigación de autoridades

 

El abogado Rodrigo Higuera consideró que estas situaciones que se están presentando ameritan una investigación en la que deben intervenir varias autoridades, no sólo la PGR.

 

“Quien hizo este trabajo de suplantación del equipaje si tomó la molestia de quitar un sello a una maleta y colocárselo a otra, ya documentada. Esto solo puede hacerse con personal de la aerolínea y con la anuencia de muchos funcionarios dentro de los aeropuertos donde estuvo la maleta”, dijo.

 

Añadió que las autoridades civiles del Aeropuerto y la misma Secretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT) deben trabajar en fijar mejores reglas. Condenó que por ejemplo, no se cuente con una relación del equipaje que se embarcó en otro país y llega a México en cada vuelo, pese a que las aerolíneas si lo tienen en sus sistemas.

 

Canes de Iniciativa Mérida

 

Entrenados en detección de estupefacientes, armamento y artefactos explosivos, papel moneda y rescate de personas, 35 canes fueron entregados a la Policía Federal (PF) como parte del tratado de Iniciativa Mérida.

 

Así lo especifica el informe de rendición de cuentas de la extinta Secretaría de Seguridad Pública federal, referente a la tercera y última etapa que comprende los bienes adquiridos durante el periodo julio-agosto 2012.

 

En el rubro del presupuesto ejercido referente al gasto generado de la manutención de los canes adiestrados, sólo se indica en la partida presupuestal 22201, un gasto de 4 millones 600 mil pesos en el rubro de “productos alimenticios para animales”.

 

En lo que va de la actual administración, la Comisión Nacional de Seguridad ha registrado 12 casos de intervención de binomios caninos de la PF en el país. Principalmente en la detección de drogas y mercancía ilegal.