El empresario Carlos Slim entrará a la televisión abierta a través de un organismo estatal, el Canal 22, con la transmisión de los Juegos Olímpicos de Invierno del año próximo.

El convenio correspondiente será firmado el próximo 6 de noviembre por América Móvil, propiedad del magnate mexicano, la cual tiene la exclusiva para difundir las competencias de Sochi, Rusia, por Uno TV.

 

El simple arreglo, o tal vez durante las negociaciones, generó un nuevo enfrentamiento entre Televisa de Emilio Azcárraga y el canal del consorcio telefónico, el cual incluyó la grabación de sendos comerciales de ataques mutuos.

 

Hasta ahora la empresa de telecomunicaciones de Carlos Slim tiene prohibido transmitir por televisión en el país por el título de concesión de Teléfonos de México. No lo puede hacer ni de manera directa ni a través de terceros.

 

Sin embargo, América Movil y Uno TV invocan la reforma a las telecomunicaciones, recién instrumentada, para acabar el modelo de concesión única.

 

Es decir, puede entrar al mercado televisivo.

 

En este caso hay participación del gobierno mexicano a través del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), el cual administra Canal 22 y, de acuerdo con la Ley de Ingresos, deberá comercializar sus tiempos para allegarse recursos.

 

América Móvil ganó el 21 de marzo pasado los derechos para transmitir los juegos Olímpicos de Invierno de 2014 y Olímpicos de Brasil de 2016. De momento sólo se incluyen los primeros en el convenio con la CNCA.

 

De extenderse el convenio, los Juegos Olímpicos de Brasil son más apetitosos en cuanto a televidentes y rendimiento económico: Los derechos son para toda América Latina –incluido México, obvio-, menos el país anfitrión.

 

Los términos comerciales no han sido revelados, pero Canal 22 abre el escaparate de la televisión abierta para la difusión de anuncios de Telmex, Telcel, Sanborn’s  y otros negocios del Grupo Carso.

 

Un acontecimiento de esta naturaleza se hará con toda la pompa de quien ha luchado largamente por entrar a la televisión abierta al público y no lo ha podido hacer: el 6 de noviembre en el Museo Rufino Tamayo a las 10:30 horas,