La construcción de las viviendas dañadas por “Ingrid” y “Manuel” será financiada con recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y del Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo), explicó Jorge Carlos Ramírez Marín, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), al encabezar la reinstalación del Consejo Nacional de Vivienda, luego de cinco años de prescindir de sus funciones.

 

Ramírez Marín, explicó durante la ceremonia que durante este año se logrará reconstruir el mayor número de viviendas en tal situación, que suman 10 mil 300 unidades, pues aseguró que se tiene el presupuesto para lograrlo.

 

“Ese es el problema más grave que tenemos en este momento (la reubicación), porque hacer otra vez estas casas en el mismo sitio sin duda representa una terquedad que conduciría a una tragedia otra vez”, dijo.

 

El funcionario manifestó que en este momento lo más importante es el trabajo con los gobiernos estatales para encontrar las zonas reubicación, y la velocidad para hacerlo dependerá de la disponibilidad de reservas de tierra de los gobiernos locales.

 

“Son muy pocos los que tienen hoy reservas disponibles, es parte de lo que se ha dejado de hacer dentro de la política territorial del país, pero se está trabajando a la mejor velocidad posible, muchas de estas serán reubicadas en conjunto, cuando hoy están dispersas”, dijo.

 

Ramírez Marín refirió que tan sólo en Guerrero hay mil 380 comunidades a menos de 250 metros de un río, pero hay otras mil 800 situadas en el cauce de ríos intermitentes, lo que “implica que están en riesgo solamente en el estado de Guerrero más de 400 mil personas”.

 

Al destacar que esta problemática no afectará la meta de vivienda de este año, dijo que “el propósito del gobierno federal es terminar este año, el mayor número posible de las 10 mil casas que tenemos que reconstruir; tenemos presupuesto para eso y creemos que podemos hacerlo”.

 

Por ello se utilizarán los recursos que tiene el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) como los del Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo), precisó el funcionario.

 

Añadió que la reinstalación del Consejo Nacional de Vivienda ayudará a acelerar la reconstrucción; “vamos a contar con muchas manos”, al reunir a las cámaras empresariales de la construcción y la vivienda, entre otros, así como a productores sociales, expertos del tema y académicos.

 

Ayer se reinstaló el Consejo Nacional de Vivienda, con el fin de dar seguimiento y cumplimento al Plan Nacional de Vivienda, luego de más de cinco años de que se realizó su última sesión.

 

El Consejo está integrado por representantes de dependencias federales, gobiernos estatales y municipales, institutos de vivienda, el sector privado y especialistas en diversas áreas relacionadas con el desarrollo urbano y vivienda, que aportarán sus opiniones para lograr mejores resultados en la materia.

 

En el marco del Día Mundial del Hábitat, el subsecretario de Desarrollo Urbano, Alejandro Nieto, destacó que el Consejo operará con el objetivo de lograr un genuino ejercicio de gobernanza democrática.

 

El funcionario de la Sedatu dijo que entre las medidas que impulsará el Consejo destacan la firma de convenios de desarrollo urbano con estados y municipios, y acciones específicas inmediatas para apoyar a las entidades afectadas por los fenómenos Ingrid y Manuel.