La presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Nicaragua, Alba Luz Ramos, dijo hoy que están dispuestos a trasladar a México a las 18 falsos comunicadores que se hicieron pasar como periodistas de Televisa y a los que se les incautó 9.2 millones de dólares.

 

“Si (el gobierno de) México decide llevárselos a cumplir sus penas allá (de 16 a 18 años de prisión por el delito de tráfico internacional de estupefacientes), existe un convenio con México y estamos dispuestos”, aseguró a periodistas la titular del Supremo nicaragüense.

 

Ramos aclaró que un eventual traslado de esos 18 mexicanos no sería catalogado como una extradición, sino como el cumplimiento de un convenio existente entre Nicaragua y México, de que los reos cumplan sus condenas en sus países de origen.

 

“Pero (la repatriación) tiene que ser cuando la sentencia sea firme ya, si ellos recurren de casación (ante la Corte Suprema), eso tiene que esperar”, explicó.

 

La Sala Penal Dos del Tribunal de Apelaciones de Managua redujo a la mitad la pena a los falsos comunicadores.

 

Ese tribunal resolvió que los mexicanos cumplirán las penas por los tres delitos que fueron condenados de manera simultánea, es decir que una vez cumplan la condena más larga, de 18 años por el delito de transporte internacional de drogas, quedarán en libertad.

 

Los mexicanos, encabezados por Raquel Alatorre Correa, fueron condenados en enero pasado a 30 años de prisión, la pena máxima en Nicaragua, por los delitos de transporte internacional de drogas, crimen organizado y lavado de dinero en perjuicio del Estado nicaragüense.

 

No obstante, la resolución del tribunal de segunda instancia redujo la pena a Alatorre, quien se hacía pasar como jefa de prensa de Televisa, y a Juan Luis Torres, considerado el otro cabecilla de la agrupación, a 18 años, y al resto de mexicanos a 16 años por el delito de transporte internacional de estupefacientes.

 

Para la titular del Supremo, sería “un alivio” que esas personas cumplan su condena en México, “porque el Sistema Penitenciario va a estar más desahogado”.

 

Ramos no dudó en que la Suprema confirmaría la sentencia si los mexicanos utilizan la casación, como último recurso.

 

“Lo que pasa es que este es un delito evidente para todo el mundo. Nadie está pensando aquí que puedan absolver a esas personas que fueron capturadas con las manos en la masa y a vistas de todo el pueblo de Nicaragua”, razonó.

 

Sobre esa misma base fue que el Ejecutivo decidió destinar seis camionetas tipo van y los 9.2 millones de dólares incautados antes de que haya sentencia firme, indicó.

 

Alatorre fue retenida junto a los otros 17 mexicanos el 20 de agosto de 2012 en un puesto de seguridad en la zona fronteriza con Honduras y la Policía nicaragüense halló 9.2 millones de dólares, además de rastros de cocaína, en las seis camionetas en las que viajaban y que tenían logotipos de Televisa.

 

Los 18 mexicanos, acusados de ser un grupo criminal “altamente organizado” dedicado al tráfico de “grandes cantidades” de droga entre Costa Rica y México, habían sido declarados culpables de narcotráfico, lavado de dinero y crimen organizado el pasado 20 de diciembre.

 

Los 18 mexicanos se presentaron como periodistas de Televisa para entrar en Nicaragua y llevaban una carta falsa, según las autoridades, firmada por el vicepresidente de información nacional de esa empresa, Amador Narcia Estrada, para que respaldara la cobertura periodística a los falsos comunicadores.

 

Televisa ha negado tener algún vínculo con los delincuentes.