La escritora Adela Fernández, hija del reconocido cineasta Emilio “Indio” Fernández, falleció este domingo a los 70 años, víctima de una oclusión intestinal que se le agravó en los días recientes, informó el restaurador y encargado de “La Fortaleza”, Cristóbal Arias Gómez.

 

El también cronista informó que los restos de la biógrafa serán velados en la casa de su padre, en una ceremonia familiar y posteriormente, se avisará a través de la página oficial de “La Fortaleza” si este lunes se le hará un homenaje de cuerpo presente de forma pública.

 

Creció en la enorme casona que El Indio Fernández se mandó construir en Coyoacán. Allí vivió con aquel hombre que cada mañana la peinó y le colocó el rebozo hasta que, irremediablemente, la pubertad le llegó. A los 15 años escapó de la Casa Fuerte para “vivir” y con la idea de hacerlo de prisa, con el temor siempre de que el padre la encontrara y ahí mismo la matara.

 

Sentada sobre un sillón de la sala de música, Adela Fernández exhala el humo del cigarro, se dispone a narrar esa serie de hechos que la llevaron en 1986 -después de la muerte del actor- a reinstalarse en la ahora casa-museo de la calle Dulce Olivia y Zaragoza.

 

La mujer de casi 70 años habla de esa vida que ella eligió, aunque sin cumplir las expectativas de aquel hombre que mucho valoraba la genialidad. Y no podía ser de otra manera. El Indio vivió rodeado por el talento de los intelectuales, artistas e ídolos de la Época de Oro del cine mexicano: Diego Rivera, Frida Kahlo, Arthur Rubinstein, Dolores del Río, entre otros visitantes habituales de la casa.

 

 

 

Lee aquí la entrevista que hizó 24 Horas con Adela Fernández