NUEVA YORK. Trabajadores indocumentados irrumpen en la escena sindical como sector central de uno de los movimientos más vigorosos en la Gran Manzana en las últimas décadas. Defienden sus derechos en una industria famosa por sus abusos: los auto lavados.

 

Desde hace año y medio, los empleados de siete de los más de 200 negocios de lavado de autos de la ciudad han formado o votado “centros de trabajadores” para proteger sus derechos laborales, lo que significa que las condiciones de unos 300 empleados han mejorado sustancialmente.

 

Activistas evitan cuantificar cuántos de esos trabajadores organizados de los auto lavados son indocumentados, pero reconocen que son numerosos en tales establecimientos, y que forman la parte central de un nuevo movimiento que busca salarios justos y un trato más respetuoso.

 

Rosalino García, que llegó de México a Nueva York en el año 2002, soportó durante casi 10 años el constante abuso verbal y físico de parte de su empleador, que le quitaba el dinero de su sueldo para pagar por accidentes laborales y que lo regresaba a su casa sin paga los días sin mucha ocupación.

 

Sin embargo, luego de que los casi 20 compañeros de García que laboran en Jomar Car Wash, en el condado de Queens, decidieron organizarse, el trato del patrón cambió.

 

Ahora, tiene la obligación de negociar un mejor contrato, independientemente de la condición migratoria de sus empleados.

 

“Ahora me siento bien, protegido por nuestra organización. Ya no tenemos faltas de respeto como antes, tampoco contacto verbal con el dueño. El dueño nos deja trabajar tranquilos, y nosotros nos sentimos más contentos”, dijo García.

 

Para García y sus compañeros terminaron además los días en que el patrón amenazaba con denunciarlos ante las autoridades migratorias en caso de que alguno se quejara de sus abusos. (Notimex)