El nacimiento del heredero de la corona británica, es como en todas las monarquías, un evento de gran importancia que se refleja en las tradiciones que han acompañado el evento a través de los siglos.

 

Algunas siguen vivas mientras que otras, seguramente para el alivio de Kate Middleton, han sido confinadas a los libros de historia.

 

 

1. Hasta 1948, los secretarios del Estado de Asuntos Internos solían estar presentes en los nacimientos reales.

 

Esto era para que se verificara que el niño efectivamente era hijo de la reina o de que era varón. Sin embargo, antes del nacimiento del príncipe Carlos, los investigadores de la oficina de Asuntos Internos no encontraron evidencia que apoyara esa creencia, así que la práctica se suspendió, según la biografía de la reina escrita por Ben Pimlott.

 

 

2. El bebé nacerá en un hospital

 

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El príncipe William fue el primer heredero de la corona británica que llegó al mundo de esa manera. Tanto él como su hermano Harry nacieron en el ala privada Lindo del Hospital de St. Mary en Paddington, Londres, el mismo lugar en el que la duquesa de Cambridge planea dar a luz.

 

La reina nació en la casa de sus padres, 17 Bruton Street de Mayfair, Londres. El actual heredero al trono, el príncipe Carlos, nació en el palacio de Buckingham y su hermana mayor, Ana, nació en Clearence House, otra de las residencias reales de la capital inglesa.

 

3. El parto será atendido por el ginecólogo de la reina Isabel II

 

 

Catalina de Cambridge será asistida en el parto por el equipo médico habitual de la Reina de Inglaterra, el doctor Marcus Setchell, quien será asistido por el doctor Alan Pharthing. El certificado de nacimiento del príncipe Guillermo en 1982 fue firmado por cinco facultativos. Se espera que el del primer bebé de los hijos de Cambridge sea sellado también por 5-6 médicos.

 

4. El hijo de Kate y William no necesitará un apellido, pues tendrá el título de Su alteza real príncipe o princesa.

 

 

Pero si quisiera uno, tiene tres entre los cuales escoger: Mountbatten-Windsor, Wales (Gales) o Cambridge.

 

En 1917, Jorge V adoptó el apellido Windsor como el “apellido” de su familia, para cambiar el de Saxe-Coburg y Gotha que sonaba demasiado alemán para llevarlo durante la Primera Guerra Mundial.

 

La reina Isabel y el príncipe Felipe combinaron sus dos apellidos, de ahí Mountbatten-Windsor. Sus descendientes directos lo pueden usar, pero no están obligados a hacerlo.

 

En su rol militar, William usa el nombre de su casa real, Wales (Gales), que tomó de su padre. Pero también está disponible como apellido Cambridge, por el título que se le dio a la pareja cuando se casaron: los duques de Cambridge.

 

 

5. La noticia del nacimiento será expuesta en un caballete

 


 

Dicta la costumbre que las noticias de nacimientos o muertes de miembros de la familia real son desplegadas en las rejas del palacio de Buckingham antes de ser difundidas por cualquier otro medio.

 

En este caso, serán expuestas en un caballete ornamentado que estará en el patio delantero del palacio.

 

 

6. La primera en saber el sexo del bebé será la reina Isabel II

 

 

La Reina Isabel II será la primera en conocer el sexo del primer hijo de los Duques de Cambridge. Aunque así lo marca el protocolo tradicional, se da por hecho que su nieto el Príncipe Guillermo llamará por teléfono a la soberana para adelantarle la noticia del nacimiento de su primer hijo, o hija. Por el conducto oficial, además, una vez que le hayan entregado el sobre que incluye el certificado de nacimiento, ella desvelará el misterio tras comunicárselo al resto de la Familia Real.

 

 

7. Los nacimientos reales usualmente son celebrados con un saludo de 41 cañonazos de la Tropa Real de la Artillería Montada del rey

 


El saludo real tradicional consta de 21 cañonazos pero como serán disparados en un parque real -Green Park- habrá 20 disparos más: un total de 41.

 

Y no serán los únicos. En la Torre de Londres se dispararán 62: los 21 básicos, 20 por ser un castillo real y 21 en nombre de la ciudad de Londres.

 

Las banderas británicas ondearán en las astas de todos los edificios gubernamentales, barcos de la Marina Real y los establecimientos de Defensa.

 

Con información de BBC y ABC

Fotos. EFE