Distintas versiones se han dado tras el video en el que aparece el alcalde de Benito Juárez, Quintana Roo, Julián Ricalde Magaña, recibiendo dinero en la oficina del entonces alcalde interino Jaime Hernández Zaragoza. El primero dice que eran recursos para la transición de gobierno y el segundo que se trató de una extorsión por parte de la ex alcaldesa Latifa Muza Simón.

 

Unas horas después de haberse difundido el video, Ricalde Magaña salió a aclarar que el dinero no era de los impuestos, como aparece el material audiovisual y que de ninguna manera eran 3 millones de pesos.

 

“Ustedes saben que eran recursos, lo dije en su momento, de apoyo a la transición y que también -lo dije en su momento- me parecía absolutamente ocioso que el propio Jaime Hernández mandara a filmarse”, dijo para indicar para qué eran el dinero que en ese momento se le entregaba.

 

Aseguró que no sabe porque Hernández le da el dinero en efectivo y que eso se le tendría que preguntar a su predecesor, y añadió que él tiene copias de las imágenes, pero sin embargo no las ha dado a conocer, pese a la petición de 24 HORAS.

 

“Todo esto es utilizado naturalmente, en un esquema de guerra sucia, ¿Qué puede afectar?, yo creo que la gente se norma un criterio, creo que hay una diferencia por un tema de autoridad moral, creo que quienes han estado haciendo uso y dedicándole horas  inclusive a difamar”, dijo Ricalde en conferencia de prensa.

 

La otra versión

 

Confrontado por el mismo video, el ex alcalde Jaime Hernández aseguró que el dinero lo entregó al ser extorsionado por la ex alcaldesa Latifa Muza Simón. Ella le habría solicitado un millón de pesos para que los regidores en 2010 aprobaran la reestructuración de la deuda pública.

 

En entrevista para Enfoque Radio, noticiario del Sistema Quintanarroense de Comunicación Social, Hernández Zaragoza dijo que él se comunicó con Ricalde para consultar si lo del depósito era cierto y aseguró que el alcalde asintió.

 

Asimismo, indicó que el dinero entregado no sumaba 3 millones de pesos y desmintió que fuera parte de la recaudación fiscal, sino que él había solicitado préstamos personales e incluso había aportado de sus propios recursos.