LONDRES. El funeral de Margaret Thatcher que será celebrado en la catedral de San Pedro, recibe cada vez más críticas por los honores que recibirá mañana una ex primera ministra que aún divide al Reino Unido, además del alto coste del servicio en momentos de crisis.

 

Son cada vez más los religiosos y políticos que cuestionan la solemnidad que tendrá el servicio fúnebre, tomando en cuenta que Thatcher es aún una figura controvertida que ha fragmentado al país en vez de cohesionarlo.

 

El deán de la catedral de San Pablo, el reverendo David Ison, se ha unido a las críticas al afirmar que el Reino Unido aún no se ha recuperado del dolor que provocaron las políticas de la ex primera ministra.

 

También el diputado laborista John Mann, expresó a los medios de ese país, que la misma Thatcher no estaría contenta con la solemnidad que tendrá su funeral y manifestó su preocupación por el gasto económico.

 

Por su parte, la portavoz laborista de Sanidad, Diane Abbott, también se mostró en contra de la pompa que rodeará el servicio.

 

“Esto va en contra de todo protocolo, Winston Churchill era distinto, él encabezó un Gobierno nacional”, dijo Abbott sobre el ex primer ministro que recibió un solemne funeral en 1965 por ser considerado una figura unificadora durante la Segunda Guerra Mundial.

 

Asimismo, el diputado laborista John Healey, cuestionó el gasto que el servicio supondrá para el contribuyente británico. “La gente tiene derecho de ver todas las cuentas del coste del funeral. Cualquier intento de ocultar parte del coste de este funeral no puede ser defendido”, señaló Healey.

 

El diario The Guardian afirma hoy que funcionarios de la Casa Real estarían preocupados por asociar a las fuerzas armadas con una política conservadora que dividió al país.

 

Se espera que mañana haya protestas en varias ciudades del país, como Liverpool o Glasgow, mientras que en Durham, varios mineros tienen previsto organizar una fiesta por la muerte de Thatcher y recordar su decisión de cerrar minas.

 

El funeral de la “Dama de Hierro” se celebrará mañana en la catedral de San Pablo y a él asistirá la reina Isabel II y su esposo, el duque de Edimburgo, además del primer ministro británico, David Cameron, y destacadas personalidades del Reino Unido.