BEIJING. La violenta película de Quentin Tarantino sobre la época de la esclavitud en Estados Unidos “Django Unchained” (“Django sin cadenas”) desapareció de los cines chinos el día de su estreno por problemas técnicos, según su importadora.

 

La extraña orden de suspensión de China Film Group Corp. fue confirmada por empleados de cines de toda China y llevó a conjeturas de que la cinta de Hollywood pudo haber sido censurada pese a que se la promocionó semanas en el país.

 

Se intentó establecer contacto con la importadora de la cinta y la dependencia censora de china, la Administración de Radio, Cine y Televisión, sin obtener respuesta. La oficina de Sony Pictures en China, compañía que distribuye la película en el país, rechazó hacer declaraciones.

 

Según reportes, los productores de “Django Unchained” habían retirado algunas escenas violentas y los censores chinos, que suelen quitar partes de violencia, sexo y contenidos políticos escandalosos, aprobaron su exhibición. Con un sistema tan estricto es poco común que una película se retire una vez que ya fue aprobada.

 

Tian Zaixing, gerente general del Cine Beichen Fortune en la ciudad de Kunming, en el sur del país, dijo que no recordaba ninguna otra película importada que no haya podido presentarse el día de su estreno. China Film Group dio su orden en una llamada telefónica por la mañana, dijo.

 

“Ayer estábamos emocionados por la película. Teníamos muchas expectativas de que fuera un éxito en taquilla”, señaló.

 

Tian dijo que esperaba que la película recaudara en abril una décima parte de los ingresos mensuales por venta de boletos, o unos 150 mil yuanes (24 mil dólares), para su cine con seis salas. Ahora debe buscar otras películas para reemplazarla.

 

“Esto significa que quizá no podremos lograr nuestra meta de venta de boletos en el año”, lamentó.

 

El problema técnico podría ser sólo una treta, dijo Tian, quien no dio otra posible explicación, aunque sí negó que una escena de desnudos fuera la culpable.

 

“Los censores tienen ojos más agudos que los nuestros”, dijo. “¿No debieron haberse percatado ya?”. El gerente dijo que la escena no era lasciva, pero que sí era poderosa como para hacer sentir al público compasión por un personaje.

 

La película es protagonizada por actores conocidos entre el público chino: Leonardo DiCaprio como el dueño de una finca en el sur de Estados Unidos y Jamie Foxx como un esclavo emancipado que se convierte en un cazarrecompensas para liberar a su esposa.

 

La película recaudó más de 160 millones de dólares en cines de Norteamérica y ha sido un éxito en el extranjero. China se ha convertido en el segundo mercado más grande del cine con ventas de 2 mil 700 millones de dólares el año pasado, según la Asociación de Cine de Estados Unidos.