TOKIO. La compañía Tokyo Electric Power (TEPCO) confirmó hoy la existencia de filtraciones de agua radiactiva en otro tanque subterráneo en la planta nuclear de Fukushima Daiichi, que resultó severamente dañada por el terremoto y tsunami de 2011.

 

Las fugas fueron confirmadas este martes por Masayuki Ono, portavoz de TEPCO, en momentos en que la empresa continúa enfrentando la acumulación masiva de agua contaminada en el sitio.

 

En rueda de prensa, Ono indicó que se sospechó de una filtración en el tanque subterráneo número uno después de que comenzó a transferir el agua contaminada hacia el tanque número dos, pero que también en éste se detectó una fuga el pasado fin de semana.

 

Explicó que se está considerando la posibilidad de retirar el líquido dentro de los dos tanques a otros depósitos de la planta debido a la desconfianza sobre el estado en que se encuentren las demás cisternas subterráneas.

 

Indicó sin embargo que la compañía no puede vaciar todos los tanques subterráneos porque actualmente no existe suficiente capacidad de almacenamiento alternativo en el sitio, de acuerdo con despachos de la agencia local de noticias Kyodo.

 

TEPCO, que está investigando la causa de las filtraciones, tiene siete tanques subterráneos para almacenar grandes cantidades de agua radiactiva resultante de las continuas inyecciones a los reactores uno, dos y tres de esa planta, que entró en crisis en marzo de 2011.

 

El agua utilizada para enfriar los reactores dañados por el terremoto y tsunami es reciclada y se vuelve a utilizar como refrigerante después de que sus niveles radiactivos se han reducido en las instalaciones de tratamiento del líquido.

 

Pero la cantidad total de agua contaminada está aumentando porque el flujo es de unas 400 toneladas de agua subterránea al día.

 

Los tanques subterráneos dos y tres contienen agua que ha sido sometida a un proceso para eliminar el cesio, pero TEPCO detectó problemas en ellos y comenzó a transferir su contenido a las cisternas número uno y seis, que no estaban ocupadas.

 

Sin embargo, el operador de la planta encontró una fuga en el número uno y decidió dar prioridad a la remoción de unas nueve mil 400 toneladas de agua radiactiva contenidas en éste y en el tanque dos.

 

Según TEPCO, se detectaron sobre 10 mil becquereles de sustancias radiactivas por centímetro cúbico dentro de ambos contenedores subterráneos.

 

El presidente de la compañía, Naomi Hirose, se ha trasladado a la planta de Fukushima, en el noreste de Japón, para evaluar la situación.