Ayer las redes sociales alrededor del mundo se convulsionaron con la noticia de que Amina, una joven tunecina de 19 años, fue condenada a ser lapidada después de recibir 10 latigazos en un sitio público; su delito fue difundir en Facebook una fotografía de ella con los senos descubiertos y con la frase escrita en el pecho “Mi cuerpo es mío y de nadie más”.

 

El responsable de la condena fue el clérigo musulman Adel Almi, quien, a través de una Fatwa (pronunciamiento legal en el Islam de eruditos religiosos), declaró culpable a Amina por mostrar su cuerpo en público.

 

La Fatwa castigará la “indecencia” de Amina que recibirá 10 latigazos en público y morirá lapidada, con la intención de que otras mujeres no sigan su “mal ejemplo”, consideró el clérigo que preside una asociación islámica radical llamada Conciencia Morerada y Reforma.

 

Por si fuera poco, la protesta de Amina desató el rechazo de su propia familia, que la considera una “ofensa al pudor de la mujer” y al Islam, desaprueba su comportamiento, la desconoce e incluso respalda su sentencia a muerte, según reportó el sitio Algeri-focus.

 

“Somos una familia musulmana y no podemos aceptar estas prácticas que han afectado gravemente no sólo a nuestra imagen, sino la imagen de la mujer tunecina y nuestra religión, el Islam”, afirmaron los padres, tíos y primos de Amina en un mensaje difundido en internet.

 

 

Amina, feminista defensora de su cuerpo

Amina es integrante del grupo Femen, movimiento feminista surgido en Ucrania en 2008, de donde tomó el modelo de protesta por el que ahora está condenada a muerte.

 

Minutos más tarde de que la joven publicara la fotografía en FB, ya tenía más de 3 mil likes y miles de comentarios, unos apoyando su causa a favor de la libertad de las mujeres en Túnez y otros en contra, además de amenazas de muerte, muchas de ellas de parte de musulamanas.

 

En entrevista con la televisión Argelina, Amina expresó su admiración por el movimiento Femen y rechazó que su fotografía sea insultante o tenga motivaciones sexuales.

 

“Es sólo una manera de pasar un mensaje. Era la única manera de que fuera visto, no fue por motivo sexual, sólo para emitir el mensaje, para defender los derechos de la mujer”, indicó.

 

Reacciones

La condena empujó a otra tunecina, identificada como Meriam, a publicar una fotografía con los senos descubiertos y el mensaje: “Nadie debería tener el poder de la vida o muerte sobre nosotras. Apoyo a Amina y a todas las mujeres árabes”.

 

Por otro lado, las protestas no se han hecho esperar y en Facebook ya se organiza un contingente que irá al Centro Educativo de la Comunidad Musulmana el viernes a las 13:30 horas, la dirección es Euclides 25, col. Anzures.

 

La convocatoria precisa que está libre de todo parámetro, por lo que invitan manifestarse como cada quien lo considere. (Con información de Notimex)