WASHINGTON. El presidente de EU, Barack Obama, declaró el estado de emergencia para Connecticut, uno de los estados más afectados por la tormenta de nieve “Nemo”, lo que facilitará el acceso a recursos federales para las labores de limpieza y recuperación de las zonas perjudicadas.

 

El presidente ordenó movilizar ayuda federal para complementar la ayuda estatal y local para responder a los esfuerzos destinados al restablecimiento de la normalidad tras la tormenta, informó la Casa Blanca en un comunicado.

 

La tormenta “Nemo” azotó durante el fin de semana a los estados de Connecticut, Rhode Island, Massachusetts, Vermont, New Hampshire, Maine y Nueva York causando diez muertos y dejando 660 mil usuarios sin energía eléctrica.

 

La acción del presidente autoriza al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y a la agencia de gestión de emergencias (FEMA) a coordinar las labores para identificar, movilizar y proporcionar el equipo y los recursos necesarios para aliviar el impacto de la tormenta durante un periodo de 48 horas.

 

Las cuadrillas de emergencia y los residentes se esforzaban ayer por despejar las carreteras y aceras después de la colosal tormenta que se desencadenó sobre el nordeste de Estados Unidos. La precipitación arrojó hasta casi un metro de nieve y desató ráfagas de viento que dejaron sin electricidad a cientos de miles de personas.

 

Los trabajadores municipales desde Nueva York hasta Boston trabajaron desde la noche del sábado al domingo en comunidades cubiertas de nieve, donde algunos automovilistas debieron ser rescatados después de pasar horas atrapados en la oscuridad.

 

“Nunca habíamos visto nada igual”, dijo Steven Bellone, funcionario del condado de Suffolk, Long Island, donde cayeron unos 75 centímetros (2.5 pies) de nieve.

 

Unos 345 mil hogares y negocios permanecían sin electricidad el domingo por la mañana, de los 650 mil que la perdieron inicialmente. Algunos distritos escolares anunciaron que cerrarán hoy, lo cual complicará a los padres el regreso a sus trabajos aunque dará otro día de diversión a los chicos.

 

Por lo menos se atribuyeron 15 muertes a la tormenta, incluida la de un niño de 11 años en Boston que se asfixió con monóxido de carbono mientras estaba sentado en el interior de un automóvil en marcha mientras su padre quitaba nieve el sábado por la mañana. Las autoridades emitieron diversas advertencias de seguridad tras la muerte del menor y la intoxicación de otras personas con monóxido de carbono.

 

Las carreteras en el nordeste estaban intransitables y el sábado en algunos lugares la nieve cubrió los vehículos. Algunas zonas tuvieron tanta acumulación que los residentes no podían abrir las puertas.