El presunto responsable del homicidio de los integrantes del grupo de vallenato Kombo Kolombia es el Cártel del Golfo. El motivo: los nexos de los músicos con Los Zetas, a quienes no sólo les dedicaban canciones, sino que realizaban presentaciones bajo su auspicio.

 

De acuerdo con investigaciones de la Procuraduría de Justicia de Nuevo León, durante sus presentaciones el grupo de música colombiana enviaba saludos a jefes de Los Zetas, presos en los penales de Topo Chico y en Apodaca.

 

Los informes establecen que el grupo musical -plagiado la madrugada del pasado viernes, tras su presentación en el bar La Carreta, del municipio de Hidalgo, Nuevo León- llevaba a cabo presentaciones en ambas cárceles.

 

Además, se les liga con la empresa ZZ-Tape, la cual operaría supuestamente con recursos de Los Zetas. Esta compañía ofrecía servicios de audio y video para fiestas y eventos sociales.

 

Según los investigadores, los cinco hombres del staff que fueron plagiados, junto con 13 músicos de Kombo Kolombia, trabajaban para la citada empresa ligada con Los Zetas. Los intérpretes de vallenatos realizaban presentaciones en sitios privados, así como en negocios de Monterrey y municipios conurbados.

 

De acuerdo con la investigación, los músicos presumían que, además de recibir auspicios en sus presentaciones y de enviar saludos, los integrantes de Kombo Kolombia, eran parte de la red de distribución de droga de Los Zetas, de ahí que antes de asesinarlos a balazos, los interrogaron para conocer qué actividades llevaban a cabo para la organización criminal.

 

El primer aviso

 

Los músicos de Kombo Kolombia ya habían sido objeto de un atentado el año pasado. El 14 de abril, durante su presentación en el Dorado Saloon, en Monterrey, fue atacado por un grupo armado, el cual asesinó a Jesús Martínez Martínez, dueño del lugar.

 

Además, fueron asesinadas otras cuatro personas, que estaban entre los 500 asistentes que habían acudido a la presentación de grupos de dicho género musical.

 

El ataque de acuerdo con lo declarado por el vocalista de Los Reyes del Vallenato, Javier López Junior, ocurrió durante la presentación de Kombo Kolombia.

 

Esto lo aclaró porque las versiones periodísticas sobre el ataque al Dorado Saloon establecían que durante el ataque, él había resultado herido.

 

Según los datos del personal de periciales, en esa ocasión, los atacantes portaban armas 0.9 milímetros, rifles de asalto AR-15 y AK-47.