BUENOS AIRES. Un tribunal argentino condenó a un banco a indemnizar con 148 mil dólares (8730 mil pesos argentinos) a un gerente de la entidad por el “estrés laboral” que sufrió durante el desplome económico de 2001, el más grave de la historia reciente del país.

 

La Sala Séptima de la Cámara Laboral consideró que el gerente estuvo sometido a un “alto estrés”, en un “ambiente laboral nocivo” que fue detonante de una minusvalía, según informó hoy el diario “Clarín”.

 

El fallo describe los síntomas del gerente como “el síndrome de ‘burn-out’ o de desgaste profesional”, un estado de agotamiento mental, físico y emocional debido, entre otros factores, a una sobrecarga de trabajo y a una actividad “poco estimulante”.

 

Los jueces consideraron que “entre los profesionales que tienen más posibilidades de sufrir este síndrome de agotamiento profesional se cuentan las actividades como las que desarrolló el actor, quien como contador se desempeñó en áreas gerenciales que eran vitales para el banco”.

 

“Fue la máxima autoridad donde se concentraba la responsabilidad de aprobar los créditos bancarios, dando cuenta también de que hacia el año 2002 fue un período muy intensivo en el tema de la refinanciación de deudas”, agregó la sentencia.

 

Durante el crack económico que sacudió Argentina en 2001, el entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, decretó el llamado “corralito”, que impedía a los ahorradores extraer más de 200 pesos (unos 40 dólares al cambio actual) por semana.