Directivos de Wal-Mart América Latina fueron removidos de sus cargos y transferidos a otros puestos este viernes, entre ellos el nicaragüense Eduardo Solórzano, quien hasta hoy se desempeñaba como presidente y director general de Wal-Mart Latinoamérica.

 

 

Solórzano tenía bajo su responsabilidad las operaciones en México, Centroamérica, Argentina, Brasil, Chile y Puerto Rico y ahora sus funciones se mantendrán en el país ya que seguirá al frente de la presidencia del consejo de administración de Walmex, puesto que ocupa desde posición enero de 2010.

 

En tanto, Scot Rank permanece como presidente y director general de Walmart de México y Centroamérica.

 

Gian Carlos Nucci, quien ocupaba el cargo de vicepresidente ejecutivo y director general de operaciones de la empresa en México, fue nombrado presidente y director general de Wal-Mart Chile en sustitución de Enrique Ostalé quien fue promovido a presidente y director general de Walmart Latinoamérica, en lugar de Eduardo Solórzano.

 

Los cambios que serán efectivos a partir del 1 de marzo de este año se dan en medio de una investigación que enfrenta en Estados Unidos por presuntos sobornos a distintos funcionarios en México para la construcción de una tienda en Teotihuacan

 

Este jueves, dos congresistas estadunidenses presentaron documentos que demuestran que los directivos de la empresa tenían conocimiento de los presuntos sobornos que se les habían entregado a autoridades mexicanas para la construcción de dicha tienda.

 

Además, los documentos revelan que Wal-Mart de México compró a representantes de PRI y PRD, a miembros del consejo municipal de Teotihuacán y al director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) con un pago aproximado de dos millones 100 mil pesos en 2003 para poder abrir una Bodega Aurrerá en ese municipio.

 

Asimismo, la empresa hizo un pago irregular de entre 3.5 y cuatro millones de pesos al Gobierno del Distrito Federal, a través del entonces secretario de Acción Electoral del Comité Ejecutivo Nacional del PRD y actual gobernador de Morelos, Graco Ramírez. En ese entonces, el gobierno de la Ciudad de México estaba en manos de Andrés Manuel López Obrador.