WASHINGTON. Después de tres años de investigación, el Comité de Inteligencia del Senado de EU aprobó hoy un informe sobre las tácticas de tortura utilizadas por la CIA, a la par grupos defensores de los derechos humanos exigen su divulgación pública.

 

Con 9 votos a favor y 6 en contra, el Comité aprobó un informe, de más de 6 mil páginas, sobre el programa de detenciones e interrogatorios que implementó la Agencia Central de Inteligencia (CIA) contra presuntos terroristas tras los atentados de 2001.

 

El informe incluye detalles sobre cada uno de los sospechosos bajo custodia de la CIA y podría arrojar luz sobre los métodos coercitivos utilizados por la agencia de espionaje.

 

El informe, que se apoya en más de seis millones de páginas de la CIA y otros archivos, será entregado al presidente Barack Obama y funcionarios clave del Ejecutivo “para que lo revisen y comenten”, aseguró la presidenta del Comité, la demócrata Dianne Feinstein.

 

Pese a las presiones de grupos humanitarios, Feinstein señaló que, por ahora, el informe permanecerá clasificado en su totalidad y su eventual divulgación dependerá de los comentarios del Ejecutivo.

 

Su publicación ofrecería claridad sobre el argumento usado durante la presidencia de George W. Bush, en particular por el entonces vicepresidente, Dick Cheney, de que la tortura ayudó a extraer importantes datos de inteligencia de presuntos terroristas.

 

Grupos defensores de los derechos humanos siempre han insistido en que el uso de la tortura, incluyendo la “asfixia simulada”, viola las convenciones de Ginebra y, lejos de producir información clave en la lucha antiterrorista, mancilla la imagen de EU en la arena internacional.