Conducir de manera distraída tiene como consecuencia que se acrecienten las probabilidades de estar involucrados en un accidente vial. Es un problema que se genera debido a que focalizamos nuestra atención en otras acciones, menos en la principal, que es estar atentos en el camino.

 

Según estudio realizado la Universidad de Leeds de Inglaterra, ha confirmado que el realizar otra tarea al momento de manejar implica que el tiempo de reacción ante un peligro se vea disminuido de manera considerable. Al realizar acciones secundarias mientras se conduce -hablar por teléfono, beber, comer o maquillarse- implica que usemos solo una mano para dirigir el volante, lo que genera que las maniobras sean menos eficaces. Es un hecho que utilizar el teléfono celular aumenta el riesgo de un percance, pero existe una acción que complica nuestra reacción ante un peligro, y esta es comer mientras se conduce.

 

 

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Durante las investigaciones se utilizaron simuladores, los cuales demostraron que el tiempo de reacción se retrasa de manera considerable al momento de dejar como segundo término la conducción. Dentro de los resultados obtenidos quedó manifestado que el tiempo de reacción cuando el conductor se alimenta detrás del volante disminuye en un 44%. Por el contrario, para efectuar una evasión y/o frenar cuando se habla por teléfono, la respuesta se reduce en un 37% aproximadamente.

 

Este porcentaje baja al 26.5% al usar el sistema de manos libres. En tanto que el ir ingiriendo una bebida no alcohólica limita los reflejos en un 22%.

 

Un dato importante a destacar es que esta misma prueba se realizó con conductores con un nivel de alcohol en la sangre del 0.08%; ahí el resultado fue del 12.5%. Aunque claro, esto no quiere decir que alcoholizado se maneje mejor, ya que en este caso se utilizaban ambas manos para el ejercicio.

 

Dentro de las consecuencias que conlleva alimentarse al volante están:

 

 

  • No utilizar ambas manos en el volante

  • Incapacidad de mantener el vehículo sobre el carril

  • No observar semáforos, señalizaciones viales ypeatones

 

Por ello es recomendable planear con antelación los viajes y así tomar previsiones, y de esta forma evitar ingerir alimentos, realizar llamadas telefónicas, entre otros. Si por algún caso es inevitable, lo que aconsejamos es estacionarse, realizar las tareas y de nueva cuenta seguir el recorrido.

 

El coche se debe usar para lo que fue creado: transportarse. Si bien ahora pasamos mucho tiempo dentro de él, no debemos olvidar que lo fundamental es poner atención cuando conducimos y que nuestra vista y sentidos deben estar atentos al camino. No por ser una actividad rutinaria deja de ser importante.