Rosario Robles, vicecoordinadora de Política Social en el equipo de transición de Enrique Peña Nieto, aseguró que Inmujeres no perderá su autonomía. Al menos por el momento.

 

Robles anunció la rectificación de la postura luego de una lluvia de quejas por parte de organizaciones civiles por la intención de que el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) pierda su autonomía y quede sujeto a la Secretaría de Desarrollo Social como parte de la nueva reforma propuesta por Peña Nieto. Robles dijo que la personalidad jurídica del instituto no se modificará, y que quedará “encorchetado” ese aspecto de la reforma que hoy se discute en la Cámara de Diputados.

 

El paréntesis, dijo, se mantendrá hasta que en conjunto se elabore un diagnóstico.

 

En una reunión sostenida a medio día, la ex perredista escuchó de aquellas que fueron sus aliadas -Robles ha sido una figura relacionada al feminismo desde hace varios años- quejas y propuestas de mujeres pertenecientes a cerca de 40 organizaciones aglutinadas por la Red Mujeres en Plural, las cuales le expresaron su preocupación por los alcances de esta iniciativa y, además, delinearon la creación de una Secretaría de la Mujer, en un futuro.

 

“La gran mayoría dijo que no era posible (la sectorización) porque se le restaba funciones al Inmujeres. Finalmente el fondo es forma y metáfora política; imagínate si desaparecen el Inmujeres, los institutos estatales y los de los municipios tenderían a desaparecer.

 

“Se vería como que no hay interés por parte del gobierno para tener una política para las mujeres, entonces es necesario mantener y reforzarlo, hacer que la igualdad permee en todas las áreas de gobierno”, aseguró una de las asistentes, Natividad Cárdenas, de la organización Mujeres al Poder.

 

El tema generó ámpula a lo largo del día en el Congreso de la Unión. En ambas cámaras, varias legisladoras panistas se pronunciaron en contra y aseguraron que no darán “ni un paso atrás en el avance” en el tema de mujeres. Asimismo, la Secretaría de Promoción Política de la Mujer de Acción Nacional “se sumó a la preocupación” por este tema.

 

Ante las exposiciones, Robles aseguró que el gobierno de Peña Nieto es un gobierno abierto al diálogo y prometió posponer la discusión del tema para lograr la participación de dicho sector.

 

Como parte de la iniciativa de reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública enviada por el priista a San Lázaro, contempla que éste, al igual que otros organismos descentralizados, queden sectorizados a la Sedesol, lo cual generó oposición de múltiples organizaciones e incluso generó que académicas, activistas y defensoras de los derechos humanos establecieran un sitio de internet con el objetivo de juntar firmas para evitar que dicho instituto perdiera su descentralización.

 

Durante la reunión que duró cerca de dos horas, la flamante peñista se comprometió, además, a modificar la exposición de motivos de dicha iniciativa, ya que en ésta se considera a las mujeres como grupo vulnerable, lo cual, “vulnera los tratados internacionales”, de acuerdo con una de las asistentes, pues de facto coloca a más de la mitad de la población en una posición de inferioridad.

 

Otra asistente, la especialista en temas de la mujer Patricia Olamendi, aseguró que se está planteando que en el diagnóstico que se propone realizar participe el propio instituto.

 

En el encuentro se planteó una reunión futura, aunque no se fijó la fecha. “Pero sí quedó claro que las mujeres tenemos una agenda que tenemos que discutir, porque no sólo son los temas de pobreza y exclusión, sino también los de derechos políticos”, afirmó Cárdenas.

 

En 2001, por iniciativa de varios partidos políticos, se creó el Inmujeres como un organismo público y descentralizado de la administración federal.

 

Horas después, Robles anotó en una reunión con diputadas en la Cámara Baja que Inmujeres y la Comisión de Pueblos Indígenas continuarán siendo organismos públicos descentralizados, por lo que no pertenecerán a Sedesol, ya que así lo decidió por la tarde el presidente electo. Consideró que, con esta decisión, las mujeres en el siguiente gobierno “somos poderosas”. CON INFORMACIÓN DE SUZZETE ALCÁNTARA