GAZA. Tras el alto al fuego acordado entre Palestina e Israel, miles de simpatizantes del partido nacionalista Al Fatah, que encabeza el presidente palestino, Mahmud Abás, se concentraron hoy en la ciudad para celebrar el alto el fuego acordado ayer entre Hamás e Israel.

 

Con banderas amarillas de Al Fatah y algunos carteles con la imagen del histórico líder Yaser Arafat, los participantes en la celebración corearon eslóganes nacionalistas mostrando lo que consideran, una victoria sobre Israel.

 

Los gritos de júbilo de los participantes, entre los que había numerosas mujeres que lucían la tradicional “kufía” palestina, se entremezclaban con disparos ocasionales al aire, práctica común en este tipo de manifestaciones.

 

En el primer día de tregua luego de ocho días de ataques, alcanzó la cifra de 164 muertos, aproximadamente 1,300 heridos y cuantiosos daños materiales.

 

A lo largo del día se esperan manifestaciones similares de otros grupos para expresar su satisfacción por el cese del fuego alcanzado ayer bajo la mediación de Egipto.

 

Por otro lado, en Israel hubo pequeñas movilizaciones en las comunidades alcanzadas por los cohetes, aunque algunos civiles demandaron al mando militar una respuesta continua y más enérgica contra Hamas.

 

Sin embargo, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, respondió que, por ahora, “lo correcto para el estado de Israel es que aproveche esta oportunidad de lograr un alto el fuego continuo”.

 

Las conversaciones diplomáticas continuarán. Hillary Clinto, al frente del Departamento de Estado estadounidense señaló que en los próximos días “trabajará con sus socios en la región para consolidar este avance, mejorar las condiciones del pueblo de Gaza y proveer seguridad al pueblo de Israel”.

 

Clinton trabajó en El Cairo con su homólogo egipcio Mohammed Kamel Amr, aunque el contenido del documento no se ha dado conocer y algunos señalan imprecisiones.

 

Por otro lado, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) envió a su representante Basam al Salihi, a Pekín, con el objetivo de recabar apoyos de China para que Palestina ingrese a la ONU como miembro observador. (EFE y AP)