ANKARA. Turquía no tiene intención de entrar en guerra con Siria, aseguró ayer el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, quien rechazó que sean accidentes la caída de obuses sirios en suelo turco, como el que mató el miércoles a cinco personas.

 

“No tenemos intención de hacer la guerra”, dijo Erdogan a la emisora NTV.

 

Erdogan rechazó que las bombas lanzadas sobre suelo turco desde Siria sean accidentes y anunció que ayer mismo cayó otro proyectil en la provincia de Hatay, cerca de Akçakale, el pueblo donde el miércoles explotaron tres obuses que mataron a cinco miembros de una misma familia.

 

“No podemos considerar el incidente en Akçakale como un accidente; eso ha pasado siete veces antes, aunque sin víctimas, y fuimos pacientes. Pero un accidente, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete y ocho ¿qué es esto?” denunció Erdogan.

 

Miembros del Gobierno turco aseguraron que Damasco ha pedido disculpas por este suceso y que ha asegurado que un accidente así no se volverá a producir.

 

“Lo han reconocido y han prometido que esto no volverá a pasar, y esto está bien”, manifestó el viceprimer ministro turco, Besir Atalay.

 

Sin embargo el Parlamento turco aprobó justo ayer una moción que autoriza al Gobierno enviar tropas a Siria en el en el plazo de un año, autorización que el Ejecutivo asegura que no supone una declaración de guerra.

 

“No es una moción a favor de la guerra. La hemos aprobado por si la necesitamos en el futuro; tiene una función disuasoria. Siria ya ha pedido disculpas y eso está bien”, explicó el viceprimer ministro Besir Atalay a NTV.

 

También autoriza el envío de tropas a “países extranjeros” bajo las premisas recogidas en el artículo 92 de la Constitución, que regula la declaración de guerra y las intervenciones militares en caso de agresión contra el país.

 

Ante esta resolución miles de personas protestaron en Ankara y Estambul contra esa decisión bajo el eslogan de “No a la guerra”.

 

Los manifestantes fueron dispersados con gas lacrimógeno, mientras que en Estambul no se registraron incidentes en una protesta que reunió a mil personas para exigir al Gobierno “quitar las manos de Siria” y en la que se corearon consignas “contra la intervención imperialista”.

 

Mientras tanto los 15 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU están ultimando los detalles de una declaración de condena sobre el incidente en la frontera entre Siria y Turquía que ha vuelto a avivar las tensiones entre ambos países.

 

La principal objeción de Rusia al texto de la declaración es que se responsabilice exclusivamente al Gobierno sirio de la escalada de tensiones entre ambos países.

 

Las consultas en el Consejo de Seguridad se producen mientras el secretario general, Ban Ki-moon, dijo hoy estar “alarmado” por el aumento de la tensión entre Turquía y Siria y pedir “máxima moderación” a las autoridades de ambos países. EFE