Lo que comenzó como un rumor la noche del miércoles 12 de este mes, en San Luis Potosí, se concretó antier. “El miércoles pasado, la Secretaría de Marina detuvo a “un jefe muy pesado”, rezaban algunos tuits. Se trataba de Iván Velázquez Caballero, alias “El Talibán”.

 

El fraccionamiento Tangamanga es una zona residencial de la capital de ese estado y ahí se ubicó una de las casas de seguridad de Velázquez Caballero, quien fue capturado junto con dos de sus escoltas, conocidos en esa ciudad como “El Niño” y “El Bachas”.

 

Sin embargo, en la presentación hecha ayer por la Secretaría de Marina, se les identificó como Carlos Uriel de Santiago Hernández, de 19 años, sin designarle un alias, y Manuel Antonio Guerrero, de 27, alias Tony.

 

Quien aportó más datos la noche de su detención, a pesar de que a las autoridades locales por lo general se les deja fuera de estos operativos, fue la Secretaría de Seguridad Pública de San Luis Potosí.

 

Pese a la presencia de Velázquez Caballero en esa entidad, la Marina apuntó que mantenía el control desde 2007 de Zacatecas, Guanajuato, Coahuila y Aguascalientes.

 

De acuerdo con la versión de la Armada de México, Iván Velázquez Caballero, quien hasta hace unas semanas era el tercer líder zeta en el país y ahora aliado del Cártel del Golfo, fue detenido antier aproximadamente a las 18:30 horas en una casa de seguridad ubicada en el fraccionamiento Tangamanga en la capital de San Luis Potosí.

 

Las autoridades dijeron que a El Talibán también se le ubica como operador financiero de Los Zetas.

 

Al momento de su detención les fueron decomisados dos vehículos, dos armas cortas, un arma larga, cuatro granadas, equipos de comunicación, 20 mil dólares y 12 kilogramos de mariguana.

 

Intervención de la DEA

La detención del capo fue celebrada por Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés). Incluso su portavoz, Lawrence Payne, dijo que “definitivamente somos parte de esto, por supuesto no hacemos operaciones en México, pero ayudamos a juntar las piezas del rompecabezas”.

 

Sobre la posibilidad de que el gobierno de Estados Unidos demande la extradición de Velázquez Caballero, el estadunidense consideró prematuro hablar sobre el tema, aunque dijo que existe una causa penal en su contra en el estado de Texas.

 

Calificó además la captura como un suceso de gran importancia y se congratuló del trabajo realizado por el gobierno mexicano y por los militares. “Estamos muy emocionados”.