La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó la libertad inmediata de un indígena tzotzil sentenciado como uno de los responsables de la matanza de 45 indígenas en Acteal, por considerar que las pruebas mediante las cuales se le condenó se encontraron viciadas.

 

Al resolver el reconocimiento de inocencia 7/2012, suman ya 37 los tzotziles que la Corte ha ordenado liberar, por haber sido sentenciados con base en un proceso viciado.

 

Los ministros de la Primera Sala determinaron que se violaron sus derechos constitucionales al debido proceso, razón suficiente para declarar su inmediata libertad.

 

El sentenciado argumentó que la resolución definitiva dictada en su contra se sustentó en declaraciones de diversos testigos y en un álbum fotográfico, pruebas que la Primera Sala en diversos amparos determinó ilícitas.

 

El pasado 1 de febrero del presente año, esa misma sala determinó liberar a otros siete tzotziles, implicados en la matanza de 45 indígenas de esa etnia, que se registró el 22 de diciembre de 1997, en esa localidad del municipio de Chenalhó, Chiapas.

 

Hace unas semanas, el gobierno de Estados Unidos otorgó impunidad al expresidente de México, Ernesto Zedillo, para que no fuera juzgado por su presunta responsabilidad en el asesinato de los tzotziles, ocurrido durante su sexenio.