Aunque MGI es una compañía afiliada a Pemex, no está sujeta a las restricciones legales que el gobierno de México impone a las empresas estatales, dice un documento confidencial que invita a posibles inversionistas a asociarse en el desarrollo de un sistema de transportación de gas natural que comenzará en la frontera de Texas con Tamaulipas y conectará con Aguascalientes y el parque industrial de Querétaro.

 

El documento preparado por Banco Santander México hace un resumen de las ventajas de ser parte de un gran negocio, respaldado por Petróleos Mexicanos, pero que funcionará como empresa privada con accionistas.

 

Una de las promesas que hace a los inversionistas interesados en el proyecto Los Ramones es que la demanda de gas natural en el país crece y hace falta reforzar la infraestructura de este país, y qué mejor socio que la paraestatal, sin los problemas de burocracia que representa estar directamente trabajando con ella.

 

La empresa de la paraestatal, Mex Gas International (MGI), afincada en Islas Caimán, invertirá 50% del capital para la construcción de los ductos de gas natural, mientras el inversor privado destinará el resto de los recursos, expone.

La inversión total supone dos mil 459 millones de dólares.

 

Al solicitar una explicación al área de comunicación social de Pemex de por qué estaba operando MGI desde Islas Caimán y por qué se había invitado a empresas extranjeras directamente a las licitaciones, no hubo respuesta. Dijeron estar muy ocupados con el incendio de los ductos en Reynosa, Tamaulipas. Antes de eso, tampoco tuvieron tiempo para responder ni informar sobre las bases de licitación de este proyecto que desde febrero promueve Santander entre potenciales inversionistas.

 

“MGI y Pemex-Gas y Petroquímica Básica (PGPB) tiene la experiencia, así como la capacidad técnica y operativa para desarrollar los proyectos. Sin embargo, MGI está en busca de un posible inversionista que aportará recursos financieros para cumplir con ese programa de gastos de capital”, dice el proyecto.

 

El texto enlista oportunidades para los socios de Pemex como una inversión en un proyecto de gran envergadura en el sector energético mexicano, generar retornos de inversión estables, una asociación con la compañía más grande de este país con la que generará sinergias a través de las capacidades técnicas y operativas, así como crear nuevas oportunidades de inversión para apoyar el desarrollo de infraestructura adicional.

 

En Oportunidades de negocio en la expansión del sistema nacional de gasoducto, un análisis presentado durante la Expo Foro Pemex realizada en julio pasado, se lee que la entrega de ofertas para Los Ramones estaba prevista para mayo, y establecía la asignación y su inicio de construcción en este septiembre.

 

Entre las firmas que podrían participar en este negocio se encuentran: Techint, Bechtel, Saipem, Cobra, Sinopec, Punji Loy, Andrade Gutiérrez e ICA Fluor.

 

A 31 de diciembre de 2011, la filial de Pemex Gas y Petroquímica Básica (PGPB), de la que depende MGI, aumentó a 791 millones de pies cúbicos sus importaciones de gas natural provenientes de Estados Unidos, desde los 536 millones de pies cúbicos que traía diarios, como resultado de un incremento en el consumo nacional.

 

Al 30 de junio de 2012, la posición de efectivo de MGI era de 52 millones de dólares, no tenía deuda en libros y no planeaba contraer deuda en el corto plazo, de acuerdo con Standard & Poor´s.

 

MGI Supply Ltd. es una subsidiaria de Pemex Gas, que fue creada el 8 de junio de 1993, e inició operaciones el 1 de enero de 1999. “MGI se creó en las Islas Caimán con el fin de proporcionar a Pemex Gas mayor flexibilidad para realizar sus operaciones de importación y exportación de gas”, dice Standard & Poor’s Ratings Services.

 

“PGPB es el cliente principal de MGI, y sus operaciones atienden las necesidades operativas y comerciales de Pemex, al ofrecerle servicios como la cobertura de precios, comercialización de gas natural y servicios de logística”, expone la agencia de calificación en un reporte publicado en agosto pasado.

 

“El riesgo del negocio de MGI es bajo (…) debido a que se creó para proteger la exposición a la industria del gas de PGPB, principalmente con derivados tradicionales”, dice.

 

De acuerdo con los documentos de Santander, que marca con el sello de información “Confidencial”, MGI construirá un ducto de gas natural desde la frontera de Tamaulipas a Aguascalientes y llegará hasta el Parque Industrial de Querétaro.

 

El gasoducto tendrá una longitud aproximada de 962 kilómetros e instalarán cinco estaciones de comprensión que generarán 156 mil caballos de fuerza para mantener la circulación del combustible.

 

Con los ductos se buscará una alternativa para satisfacer los requerimientos de gas natural en el centro y oeste de México, en donde la demanda se ha visto afectada por una disminución de la producción de gas en el sureste, anota el texto.

 

El nuevo gasoducto suministrará 17% del consumo total de gas en México para 2014, asegura.