El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, aseguró que es transitorio el incremento en la inflación derivada del alza en los precios del huevo y la tortilla, por lo que no se requiere de un ajuste de política monetaria sino de acciones específicas que resuelvan la problemática.

 

“Todos estos son fenómenos transitorios, la inflación se define como un aumento generalizado en los precios y obviamente no es lo que estamos viendo; es un fenómeno muy concentrado en cuatro productos y en una problemática que no se resuelve a través de política monetaria sino de políticas muy específicas que atiendan estos problemas”, dijo.

 

Al participar en la 13 Conferencia Anual “México y la nueva realidad global” de Moody’s, el funcionario aseguró no obstante que el banco central se mantendrá atento a dichos incrementos.

 

Sostuvo que el Banxico vigilará que este tipo de aumentos “no generen factores de segundo orden en otros precios, que empiecen a contaminar el proceso de fijación de precios en la economía; estaremos vigilantes pero pensamos que será un factor transitorio que tenderá a revertirse”.

 

Incluso, reiteró que las expectativas de inflación para 2013 prácticamente se mantienen en niveles de 3.6 y 3.7 por ciento, por debajo de 4.0 por ciento, que es el techo del objetivo del Banxico, de 3.0 por ciento más/menos un punto porcentual.

 

Subrayó que el incremento en la inflación anual a 4.57 por ciento se debe a factores transitorios y cuatro productos explican el 0.60 de este nivel, como son la tortilla, que refleja el incremento en el precio del maíz amarillo; el frijol, afectado por las sequías, y el huevo por la influenza aviar, sumado a la carne de res.

 

Carstens puntualizó que si se eliminan los alimentos y la energía del indicador, la inflación es de alrededor de 2.4 por ciento, lo que refleja que “la inflación está bajo control”.