El Banco de México (Banxico) mantuvo sin cambio su pronóstico sobre el crecimiento de la economía nacional este año, en un intervalo entre 3.25 y 4.25 por ciento, pese a la desaceleración “sincronizada” de la economía mundial, pero urgió a aprobar las reformas estructurales.

 

El gobernador del Banxico, Agustín Carstens, informó que la expectativa del instituto central para la economía mexicana el año próximo se mantiene también sin cambio, en un intervalo de entre 3.0 y 4.0 por ciento.

 

Proyectó que la economía mexicana creció 4.2 por ciento en el segundo trimestre del año -dato a conocerse este jueves- y que calificó como “alentador”, si se considera la desaceleración de la economía global en dicho lapso.

 

Al presentar el “Informe sobre la inflación abril-junio 2012”, el funcionario dijo que es urgente aprobar las reformas estructurales pendientes para que la economía logre mayores tasas de crecimiento, pues eventualmente la desaceleración global puede afectar la actividad productiva nacional.

 

Carstens ratificó el pronóstico de inflación del banco central para este año y 2013, en un intervalo entre 3.0 y 4.0 por ciento, aunque los precios al consumidor registrarán un incremento temporal, sobre todo en el tercer trimestre.

 

Las expectativas sobre el incremento en el número de trabajadores asegurados en el IMSS también se mantienen sin cambio, en un aumento entre 540 y 640 mil personas este año, y para 2013 de entre 500 y 600 mil personas.

 

La desaceleración económica de México, que está presente en los pronósticos de 2013 respecto a 2012, refleja el hecho de que si se consolida la “desaceleración sincronizada” de la economía mundial, ésta eventualmente llegará a afectar al país, señaló.

 

Por ello, dijo el banquero central, si se dan relativamente pronto las reformas estructurales que requiere el país, el comportamiento previsto para la economía nacional en 2013 sería más favorable y mucho mayor.

 

Para Carstens, dada la atonía en la economía mundial que se anticipa y que se ve atenuará hacia el año entrante, es doblemente urgente que esas reformas se den.

 

“Entonces sí quisiera subrayar ese sentimiento de urgencia que se ve, de tal manera que México continúe distinguiéndose por un comportamiento mejor en relación con la gran mayoría del resto de las economías en el mundo”, expuso.

 

Insistió en que ha aumentado el riesgo de un crecimiento menor de México, sobre todo por la desaceleración en la economía mundial, tanto por el comportamiento de Europa como de Estados Unidos y otros países emergentes.

 

“El mensaje del banco es que se acelere el proceso de reformas estructurales, realmente sigue muy presente la preocupación de que la desaceleración de la economía mundial va a continuar, eso eventualmente podría tener un impacto en México”, alertó.

 

A pesar de que la economía mundial se desacelera de una manera más amplia, el Banxico estima “probable” que la economía mexicana crezca en 4.25 por ciento este año.

 

Carstens sostuvo que el cambio de gobierno en México no ha sido un factor de preocupación en los mercados financieros, y que si la próxima administración federal es exitosa en promover las reformas estructurales, las expectativas sobre el país mejorarán.

 

Sobre la inflación, comentó que la Junta de Gobierno del Banxico prevé que se ubique entre 3.0 y 4.0 por ciento, porque el hecho de que actualmente este por arriba de ese nivel es “un fenómeno transitorio” que se va a corregir.

 

En 2013 también se presentará este intervalo, pero estará mostrando una tendencia más clara hacia la convergencia al 3.0 por ciento, señaló.

 

No obstante, el banco central se mantendrá atento a la evolución de todos los determinantes de la inflación, “dado que el comportamiento de éstos podría ser aconsejable ajustar la postura de política monetaria para hacerla más o menos restrictiva, según el escenario que se presente”.

 

Una vez que “el polvo se asiente” de la actual turbulencia internacional prevalecerán los fuertes fundamentos de la economía mexicana y “eso debería generar una apreciación del tipo de cambio”, lo que daría un mejor comportamiento de la inflación, añadió el funcionario.