Roma. La policía griega informó hoy que mil 600 inmigrantes indocumentados serán deportados, luego que las autoridades lanzaron una ofensiva en contra de extranjeros que ingresan de manera ilegal al país helénico.

 

Más de seis mil personas que no poseían permiso de residencia han sido detenidas, aunque la mayoría fueron puestos en libertad .

 

Medios griegos informaron que también hubo operativos importantes cerca de la frontera con Turquía, en el noreste del país, luego del temor que existe de que el conflicto en Siria genere un gran flujo de refugiados a ese país.

 

El Ministro de Protección Ciudadana, Nikos Dendias, afirmó que no es una medida temporal y que el operativo continuará. Los inmigrantes sin la documentación necesaria serán enviados de vuelta a sus países.

 

Dendias defendió la represión y anotó que la difícil situación económica de Grecia, significa que no podía permitirse una “invasión de inmigrantes”.

 

Llamó a la cuestión de la inmigración una “bomba contra los cimientos de la sociedad y del Estado”, reportó el periódico griego Kathimerini.

 

La operación se produce luego que algunos políticos griegos han pedido al gobierno a adoptar una línea más dura sobre la inmigración ilegal.

 

En las recientes elecciones, el partido de extrema derecha Golden Dawn ganó los votos suficientes para entrar en el Parlamento.

 

Grecia a menudo ha sido objeto de críticas por su manejo de los inmigrantes. Amnistía Internacional lo acusó de tratar a los solicitantes de asilo como delincuentes y mantenerlos en centros de detención.

 

Grecia ha pedido con frecuencia a otras naciones europeas realizar un mayor esfuerzo para combatir la inmigración ilegal en la UE, con el argumento de que lleva una carga desproporcionada.