“El gobernador Romney cortaría los impuestos a las personas que más tienen, eliminaría las regulaciones para los grandes bancos y dice que si hacemos eso, nuestra economía crecería y todos nos beneficiaríamos. ¿Pero sabés qué? Ya probamos esa opción de “arriba para abajo”. Es lo que causó este desastre en primer lugar”, dice Obama en su nuevo anuncio proselitista que comenzó a exhibirse ayer por la noche en Estados Unidos.

 

Luego de los exitosos y duros anuncios en los que cuestionaba la trayectoria de su oponente Romney al frente de la firma Bain Capital, acusándolo de mudar empleos a países como India y China en perjuicio de los obreros estadounidenses, ahora el presidente apunta al plan económico del republicano, quien anunció que eliminará varias de las medidas implementadas por Obama y eximirá de impuestos a los grandes empresarios para alentar la creación de empleos.`

 

“Yo creo que la única manera de crear una economía duradera es fortalecer a la clase media, pidiendo a los ricos que paguen más para poder cancelar nuestra deuda de una forma balanceada, para poder invertir en educación y fábricas y energía de producción local”, afirma el presidente, quien todavía lidera las encuestas generales de intención de voto y es el claro favorito en los estados en donde el voto colegiado suele ser más peleado entre demócratas y republicanos.

 

Retomando su campaña que tras la masacre en el cine de Denver había sido suspendida, Obama habló frente a un auditorio compuesto por veteranos de guerra, un grupo que en el 2008 conformaron el 15% del electorado, y este año se perfilan como un bloque electoral clave en estados como Virginia, Colorado, Florida y Ohio.

 

El candidato republicano Romney, se presentará el miércoles ante el foro de veteranos de guerra, antes de emprender su primera gira al exterior como candidato, con paradas en el Reino Unido, Israel y Polonia, con miras a recabar apoyo internacional.

 

Se prevé que en su discurso de mañana, el aspirante conservador explique sus políticas para la defensa y seguridad nacional, y reitere sus acusaciones de que Obama ha sido “blando” en política exterior.

 

La participación de ambos ante los veteranos se produce en momentos en que la creación de empleos y los posibles recortes masivos de unos 500.000 millones de dólares al Pentágono a partir de enero próximo figuran entre las principales preocupaciones de ese grupo.

 

En ese sentido, Obama instó al Congreso a que logre un acuerdo que evite esos recortes masivos, y reiteró su queja de que los republicanos prefieren mantener los recortes tributarios para los más ricos “aún si eso pone en riesgo” los fondos militares.