Más de 10 millones de mexicanos no disponen de documentos que los identifiquen, lo que además de vulnerar su derecho a la identidad les expone a ser objeto de abusos y violaciones, según denunció ayer la ONG Be Foundation.

 

“Sin un nombre, una nacionalidad demostrable, ni nada que les reconozca, como ciudadanos son invisibles, legalmente no existen, por lo que son un blanco fácil para que se violen sus derechos”, dijo en rueda de prensa Karen Mercado, directora de la ONG mexicana.

 

Aunque no existen números coincidentes, cifraron en más de 10 millones los afectados con base en una “estimación” a partir de los datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

 

Según un informe de este último organismo, citado por la ONG, siete millones de personas no tenían documentos de identidad en 2007. En 2010, el Instituto de la UNAM calculó que 10.8% de la población estaba en esta situación, mientras que el BID, en un estudio del mismo año, aseguró que esa cifra alcanzaba 14.2%.

 

De acuerdo con los datos del último censo, de 2010, México tiene 112.3 millones de habitantes.

 

Mercado precisó que el alto número de personas indocumentadas afecta especialmente a colectivos “vulnerables” como indígenas, personas de bajos recursos o discapacitados, que por limitaciones “geográficas o económicas” no pueden acudir a inscribir a los recién nacidos dentro de los seis primeros meses de vida tal y como marca la ley.

 

Una vez transcurrido este periodo, Mercado criticó que el proceso legal se vuelve “tedioso” y “caro” por los documentos exigidos para demostrar que no se pudo llevar a cabo la inscripción en el plazo marcado y las multas que pueden alcanzar los 800 pesos aplicadas a los registros tardíos en varios estados.

 

Actualmente, según cifras de Unicef citadas por la ONG, 14.2% de los niños menores de cinco años no cuenta con registro ni acta de nacimiento en México, una cifra a la que anualmente se suman aproximadamente 600 mil neonatos sin reconocimiento oficial, del total de 2.5 millones de nacimientos anuales.

 

A nivel regional, en América Latina y el Caribe uno de cada seis niños menores de cinco años no tiene acta de nacimiento, en tanto que a nivel mundial, según Unicef, más de 50 millones de niños, 41% de la población infantil, no son registrados al nacer.

 

“Están expuestos a la discriminación, los abusos, la explotación e incluso las adopciones ilegales. Además, son perfectos blancos para el crimen organizado tanto para cometer crímenes contra ellos como para que se cometan crímenes con ellos”, aseguró.

 

El director de Be Foundation, Oscar Ortiz, aseguró por su parte que las autoridades deben hacer un esfuerzo por poner fin a esta situación y hacer respetar un derecho recogido por la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño de 1989.

 

Asimismo, señaló que México se encuentra dentro de los países de América Latina con la tasa más alta de menores sin documentos de identidad, pues agregó que, entre otros factores, se dan casos de analfabetismo en las familias y existe una “falta de conciencia” sobre la importancia del registro de nacimiento.