Gdansk, Pol. La Selección de Alemania goleó 4-2 a su similar de Grecia y de este modo avanzó a las semifinales de la Eurocopa Polonia-Ucrania 2012 y confirmar su condición de favorito para ganar el certamen.

 

Los autores del triunfo germano fueron Philipp Lahm (39), Sami Khedira (61), Miroslav Klose (68) y Marco Reus (74). Georgios Samaras, al minuto 55 y Dimitris Salpingidis, al 89 de penal, marcaron por los griegos, que no pudieron dar la sorpresa.

 

Con la victoria en el estadio Arena Gdansk, Alemania se ubicó en semifinales, donde se medirá al vencedor de la serie entre Inglaterra e Italia, en lo que será una prueba más complicada que la que tuvo hoy ante Grecia.

 

Como era de esperarse Alemania salió con mayor determinación al ataque en busca del gol tempranero, que le facilitará el encuentro, mientras que los helénicos sabedores de sus limitaciones apostaron al error del rival y aguantaron al contragolpe a la espera de un milagro.

 

Joachim Low, sorprendió en su once inicial ya que dejó en la banca a Lukas Podoslki, Tomas Muller y Mario Gómez, para darle oportunidad a Marco Reus, Miroslav Klose y Andre Schurrle y éste último pudo abrir el marcador antes de los 10 minutos, pero su tanto fue anulado por fuera de lugar.

 

A los 23 minutos los teutones construyeron su mejor jugada de conjunto, donde Mesut Ozil recibió el balón, entró al área de frente al portero Michail Sifakis, pero su remate fue bien atajado por el cancerbero griego.

 

Pasada la media hora de juego y ante los pocos espacios al frente, los alemanes comenzaron a intentar con disparos desde afuera del área y el primero fue Sami Khedira, quien de pierna derecha obligó a que Sifakis recostara a su lado derecho.

 

El premio llegó para la Mannschaft, que se adelantó en el marcador 1-0, al minuto 39, cuando Philipp Lahm se animó a ir al frente se hizo el espacio y desde los linderos del área sacó derechazo para superar el lance de Michail Sifakis, quien pese a tocar el esférico no fue suficiente para evitar la caída de su arco.

 

La diferencia era poca, por lo que los griegos aún se mantenían con vida, tuvieron que arriesgar más y sin mucho esfuerzo, emparejaron las acciones en el inicio del segundo lapso, cuando por la banda derecha el recién ingresado Giorgios Fokatis envió centro para la llegada de Georgios Samarasm, quien sólo empujó para el 1-1, al 55.

 

Pero el gusto le duró poco a los helénicos. Los germanos reaccionaron de forma inmediata, volvieron a tocar el balón, subió Jerome Boateng por el costado derecho sacó servicio y Khedira sorprendió con remate de volea y tras anticipar a su marcador, le significó el 2-1, a los 61 minutos.

 

Sin bajar el ritmo Alemania liquidó el encuentro al 68, con el 3-1 para evitar sorpresas. En tiro de esquina el experimentado Miroslav Klose golpeó el balón con la cabeza ante la mala salida de Michail Sifakis, para perforar el arco griego.

 

Los pupilos de Joachim Low, quisieron dejar en claro su dominio, no le prestaron la pelota a los griegos, que desaparecieron del terreno de juego, lo que propició que se llevaran una goleada. El 4-1 se presentó cuando Klose disparó, pero el portero defendió bien sin embargo, en el rebote Marco Reus remató de aire y aumentó la ventaja teutona, en el minuto 74 de acción.

 

En el tiempo restante los germanos dejaron de presionar y el conjunto de Grecia aprovecharon la oportunidad y pudieron acortar distancias, aunque sin poner en riesgo la victoria de Alemania. Fue al minuto 89, cuando Boateng tapó un disparo con al mano dentro del área y el silbante decretó penal en contra de los germanos, el disparo desde el manchón penal fue bien ejecutado por Dimitris Salpingidis, quien engañó a Manuel Neuer, para poner el marcador 4-2.

 

Se notó la diferencia entre ambas selecciones dentro del campo, salvo el empate parcial, Alemania controló bien el juego, tuvo para más goles y le negó a Grecia la posibilidad de repetir la sorpresa del 2004, cuando se coronó con todos los pronósticos en contra.