MADRID. Un día después de pedir auxilio económico a la Unión Europea para sanear el sistema bancario español, el presidente del gobierno Mariano Rajoy aseguró el domingo que ese rescate y el conjunto de reformas emprendidas han evitado que Bruselas intervenga el país y reconoció que todavía se avecinan tiempos difíciles.

 

“Si no hubiéramos hecho en estos cinco meses lo que hemos hecho, lo que se hubiera planteado ayer (sábado) era la intervención del reino de España”, dijo Rajoy en rueda de prensa. “Como llevamos cinco meses haciendo nuestros deberes, lo que se acordó fue la apertura de una línea de crédito para nuestro sistema financiero”.

 

El Eurogrupo, que reúne a los 17 países que comparten el euro, anunció el sábado la concesión de un préstamo de hasta un máximo de 100 mil millones de euros (125 mil millones de dólares) para sanear parte de la banca española, ahogada en un mar de activos tóxicos y créditos en riesgo de impago por el colapso inmobiliario en el país ibérico.

 

La cantidad concreta de dicho préstamo se conocerá en los próximos días, cuando concluyan las dos evaluaciones independientes de la cartera bancaria encargadas por el gobierno.

 

Rajoy, muy criticado a nivel interno por no haber dado la cara el sábado, evitó en su comparecencia mencionar la palabra rescate, presentó el acuerdo como un éxito de España y Europa y dio a entender que la petición de ayuda para los bancos forma parte de un plan preconcebido, y no un recurso a la desesperada por la presión sobre la deuda española de las últimas semanas, para restaurar la confianza internacional en la economía ibérica.

 

“A mí nadie me ha presionado, el que he presionado he sido yo, porque quería una línea de crédito para resolver un problema muy importante”, afirmó.

 

“Conviene mantener la visión de conjunto y no perderse en los vericuetos del momento: lo de ayer forma parte de un plan global de saneamiento de la economía española y de su puesta a punto para recuperar el crecimiento y por encima de todo la creación de empleo”, agregó.

 

En ese sentido, dijo que el préstamo fue posible gracias a la credibilidad de las políticas de ajuste para reducir el déficit puestas en marcha desde su llegada al poder en diciembre y aseguró que su gobierno aprobará más reformas en el futuro.

 

Sin condiciones

 

Enfatizó que la ayuda europea a la banca tendrá que devolverla la banca. Reiteró que no está condicionada a ajustes macroeconómicos y fiscales, como sí ocurrió en los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal, supeditados a duros planes de austeridad.

 

Rajoy garantizó el saneamiento del sector bancario más deteriorado, un 30% según estimaciones del Fondo Monetario Internacional, y dijo que el objetivo final es que el crédito, absolutamente estancado, vuelva a fluir para impulsar la recuperación económica.

 

“Es un paso más. Un paso más en la buena dirección”, dijo. “Ayer (sábado) ganó lo que más nos importa para conseguir el crecimiento económico y el empleo, que es la posibilidad de que vuelva a fluir el crédito a las familias, a los emprendedores, a las pequeñas y medianas empresas”.

 

Rajoy se mostró satisfecho con el resultado final del préstamo y consideró que lanza un mensaje muy positivo sobre el futuro de Europa y de la viabilidad del euro como moneda. Aunque en clave interna, admitió que la situación de la economía española, en recesión y con un desempleo de casi el 25%, sigue siendo delicada y que no conviene bajar la guardia.

 

“Este año será malo y el crecimiento será negativo en un 1.7% (del PIB), y además este año va a aumentar el paro (desempleo)”, agregó. “El objetivo prioritario de este gobierno sigue siendo la recuperación económica y la creación de empleo”.

 

Malestar

 

Rajoy fue cuestionado por su intención de viajar a Polonia para asistir al partido que disputaba la selección española frente a Italia en la Eurocopa de futbol en las actuales circunstancias que atraviesa el país.

 

Rajoy dijo que España es la campeona del mundo y que quiere acompañar al equipo, pero que apenas estará unas horas fuera del país.

 

“Estas cosas ya se sabe que son opinables. Si no voy, que por qué no va; y si voy, que porqué va”, explicó Rajoy, quien tenía previsto asistir a ese partido desde hace semanas, según figuraba en su agenda pública.

 

Precisamente, el esperado debut de la Roja, que defiende la corona europea lograda hace cuatro años, quedó eclipsado en los medios de comunicación y entre los españoles, absolutamente desconcertados por la gravedad de la crisis económica que atraviesa el país.

 

“Nos va a meter en cintura. Como nosotros no sabemos, lo van a hacer los europeos”, dijo Ramón López Barrantes, de 34 años, mientras ojeaba los diarios económicos. “Somos un país poco serio”.

 

“Es una vergüenza para el país”, admitió Luisa Saraguren, una funcionaria de 44 años. “El rescate estaba cantado. Sabíamos que iba a suceder y las consecuencias de esta ayuda van a ser mucho más grandes en comparación con los que hemos vivido hasta ahora”.

 

“No había en absoluto otra opción”

 

Mark Rutte

Primer Ministro holandés

 

 

“Con esta profunda reestructuración del sector financiero y la implementación determinada de las reformas estructurales y de consolidación fiscal, estamos convencidos de que España puede recuperar gradualmente la confianza de los inversionistas y del mercado y crear las condiciones para volver a un crecimiento sostenible y la creación de empleos”

 

Comunicado del Eurogrupo

 

 

 

“Se encuentra en el camino correcto”

 

Wolfgang Schäuble

Ministro alemán de Finanzas

 

 

 

“Un testimonio de la solidaridad reforzada entre los países de la zona euro”

 

Pierre Moscovici

Ministro francés de Economía

 

 

 

“Quisiera manifestar mi profunda satisfacción por el anuncio hecho por los miembros del Eurogrupo, que complementa las medidas adoptadas por las autoridades españolas en las últimas semanas para fortalecer el sistema bancario del país”

 

Christine Lagarde

Directora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI)

 

 

 

“Estas acciones son importantes para la salud de la economía española y como un paso concreto en el camino hacia la unión financiera, algo vital para la resistencia de la eurozona”

 

Timothy Geithner

Secretario del Tesoro de EU