Las complicaciones para identificar los cadáveres, resultado del nivel de violencia que priva en el país, ha obligado ha establecer protocolos internacionales y experiencias de otros países, reveló la directora del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Colombia, María Dolores Morcillo Méndez.
En el marco de la Reunión Nacional de Servicios Médicos Forenses, que se lleva a cabo en las instalaciones del Semefo del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, afirmó que es posible obtener datos de necrodactiloscopía de un cadáver calcinado.
A su vez, precisó en su conferencia Autopsia médico legal orientada a la identificación de cadáveres, que es importante contar con un archivo completo sobre cada uno de los cadáveres, en el cual se incluyan fotografías, datos de vestimenta, carta dental, edad, talla, sexo, ancestro racial, señas particulares, causa y manera de muerte.
La especialista colombiana dijo que en su país, por el nivel de riesgo que existe en los sitios donde ocurren los asesinatos, no asisten al lugar los médicos forenses, por lo cual se apoyan con los datos de la Policía Judicial.
Subrayó que también es importante no perder detalles del cadáver, porque después puede servir para hacer la identificación.
Un ejemplo de lo anterior, agregó, es el hecho de aportar de forma adecuada lo relativo a la edad y a la talla, porque se presentan casos en los cuales no se logran las identificaciones porque estos datos no corresponden.
En este sentido, apuntó que por eso es importante la participación del antropólogo y del odontólogo de forma conjunta con el médico.
Otro aspecto que debe tomarse en cuenta en los casos de personas no identificadas que se inhuman en los cementerios, es porque muchas veces en estos sitios los restos dejan de estar individualizados después de cinco años y se mandan a fosas colectivas con prácticas no adecuadas, las cuales provocan que se pierda la información.
Respecto al tema de Atención a Familiares, los expertos analizaron el papel de estos servicios, el trato que se debe dar a las víctimas, así como la forma de abordar la información a las víctimas, que en estos casos siempre tienen un rol activo.