Una de las hipótesis en la Procuraduría General de la República (PGR) en la investigación por la muerte de 49 personas en Cadereyta, Nuevo León, es que algunas de las víctimas sean personas que no tienen relación aparente con alguna actividad delictiva.

 

Fuentes de la dependencia señalaron esta posibilidad en el rastreo de datos por la disputa entre cárteles de la droga, fundamentalmente los del Pacífico y Los Zetas, a quienes se les atribuyen los recientes casos de violencia extrema.

 

En el caso de las víctimas abandonadas la madrugada del domingo en el municipio de Cadereyta, la dependencia federal indicó que no se ha concretado la identificación de ninguno, por lo que no es posible establecer que tengan vínculos con la delincuencia organizada pese a que el móvil de los asesinatos sea un ajuste de cuentas.

 

En el caso de los 18 cuerpos dejados en una carretera de Jalisco la semana pasada, se ha establecido preliminarmente, que varios de ellos son sujetos que fueron secuestrados días antes en la entidad, y que no tenían conexión con alguna actividad delictiva.

 

La dependencia federal, que coadyuva con los gobiernos estatales en la investigación de estos crímenes, dijo que no es posible establecer un plazo para que se logre la plena identificación de las víctimas.

 

El lunes, el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, rechazó en conferencia de prensa que vaya a existir impunidad para los jefes del narcotráfico, en relación a las 49 muertes en Nuevo León.

 

Agregó que el gobierno federal no se frenará hasta dar con el paradero de los cabecillas de los cárteles del Pacífico y Los Zetas.

 

Dijo, además, que “las organizaciones criminales jamás lograrán que la maldad, la cobardía y la muerte con la que actúan se conviertan en la base que rija la convivencia entre los criminales”.

 

Los mensajes

 

A través de mantas colocadas en Zacatecas y San Luis Potosí, el Cártel de Los Zetas se deslindó de la matanza de 49 personas, cuyos restos fueron depositados sobre una carretera del municipio de Cadereyta, Nuevo León.

 

Sin embargo, admiten su responsabilidad en los asesinatos de 18 personas en Jalisco y de 9 en Nuevo Laredo; en el primer caso, los cadáveres aparecieron la mañana del pasado 10 de mayo y los del municipio tamaulipeco, fueron hallados el pasado 4 de los corrientes pendidos de un puente.

 

Las mantas con mensajes coincidentes aparecieron en Fresnillo y Jerez, Zacatecas, así como en Ciudad Valles, San Luis Potosí, aparecieron durante las primeras horas de ayer, y fueron retiradas por autoridades locales y federales.

 

La presunta respuesta de Los Zetas a los señalamientos hechos por el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, establece que las autoridades federales deben realizar una investigación.

 

Además, dicen que Cadereyta es su territorio, por lo que consideran ilógico que se les responsabilice de haber ido a tirar cuerpos en esa zona.