De acuerdo con las primeras investigaciones de la Policía Ministerial de Nuevo León, el ataque ocurrido ayer por la madrugada en el establecimiento “Dorado Saloon”, de Monterrey, podría ser resultado de la negativa del dueño del establecimiento a pagar derecho de piso que le exigió un grupo delictivo ligado con el crimen organizado.

 

En el ataque que se registró en ese sitio ubicado en la zona norte de la capital de esa entidad, el grupo armado ejecutó al dueño del lugar y acribilló a otras cuatro personas.

 

La irrupción de los hombres armados con rifles de asalto y pistolas 9 milímetros, se registró a las 0:30 horas de ayer, durante la presentación del grupo de cumbia colombiana Javier López y sus Reyes Vallenatos.

 

Según versiones de testigos, cuando los hombres armados ingresaron en el lugar y empezaron a disparar,  algunos de los asistentes trataron de resguardarse y otros corrieron para salir del lugar, pero afuera había otros integrantes del comando, quienes dispararon contra la multitud que trataba de abandonar ese centro de espectáculos.

 

El atentado de ayer dejó lesionado a Javier López, vocalista del grupo que interpretaba cumbias colombianas. El cantante había descendido del escenario, para corregir una falla en el sonido.

 

De acuerdo con las autoridades de esa entidad, al activarse el Código Rojo por la balacera que ocurría en ese lugar ubicado sobre la avenida Camino Real, esquina Primero de Mayo, en la colonia CROC,  acudieron al lugar policías ministeriales, de Fuerza Civil y de la Policía Federal.

 

Según el reporte de lo ocurrido, cuando el grupo abrió fuego en el interior del lugar quedaron muertas tres personas, mientras que el dueño –del cual no se proporcionó el nombre- fue asesinado cuando se encontraba en la taquilla del establecimiento y una joven de 20 años de edad murió mientras recibía atención médica en el hospital Adelaida Lafón.

 

En el negocio, los policías encontraron 60 cartuchos percutidos de rifles AR-15, AK47 y calibre 9 milímetros.

 

Los antecedentes

 

En esa ciudad norteña, durante marzo se registraron dos ataques a bares, con un saldo de tres muertos y siete heridos.

 

Además, desde hace más de un año, los ataques a centros nocturnos han sido una constante en la capital de Nuevo León. Hasta ahora, el  atentado con el mayor número de víctimas ocurrió el 8 de julio del año pasado en el bar “Sabino Gordo”, con un saldo de 20 muertos y cinco heridos.

 

En Monterrey, así como en los municipios de Apodaca, Cadereyta, Vallecillo, Sabinas Hidalgo y Guadalupe, los cárteles de Los Zetas y del Golfo se disputan el control del tráfico de drogas, el trasiego, la distribución al menudeo, y el control de los mercados de piratería.