El hospital Médica Sur informó que la causa de la muerte del doctor Jorge Carpizo McGregor fue por un choque anafiláctico que sufrió cuando lo preparaban para la cirugía.

 

Esto significa que un medicamente administrado habría causado la complicación previa a la operación para extirpar una hernia que lo aquejaba.

 

A través de su cuenta de Twitter @MedicaSurOfi, el hospital señaló “el fallecimiento se debió a un choque anafiláctico durante la preparación para su intervención quirúrgica”.

 

El ex Ombudsman y rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) sería intervenido esta mañana, en una operación programada con antelación, sin que fuera atendido de urgencia.

 

En primera instancia, trascendió que las complicaciones de salud se dieron durante la intervención lo cual quedó descartado por las autoridades médicas del centro donde se encontraba el jurista y político mexicano.

 

El ex procurador  General de la República, que no tenía ningún problema de salud cuando ingresó al hospital, nació en Campeche, Campeche el 2 de abril de 1944.

 

Jorge Carpizo McGregor fue doctor en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), investigador emérito de la UNAM adscrito al Instituto de Investigaciones Jurídicas, investigador nacional nivel 3 del Sistema Nacional de Investigadores y presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional.

 

Carpizo fue un personaje controvertido y polémico, pero reconocido incluso por sus críticos debido a su honestidad sin mácula.

 

Su honestidad le permitió sortear asuntos como el asesinato del cardenal Juan José Posadas Ocampo, así como la presencia de los hermanos Arellano en la Nunciatura Apostólica para jurar que no fueron ellos quienes quitaron la vida al purpurado.

 

Entre otros cargos, en la Máxima Casa de Estudios laboró como: rector (durante la huelga de 1986-1987), abogado general, coordinador de Humanidades, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas y presidente de la Comisión Editorial.

 

Como comisionado de los Derechos Humanos dio la pelea contra el Ejército con el asunto de Tlalixcoyan, un episodio en el que resultaron involucrados soldados y policías judiciales federales.