Las 167 osamentas halladas recientemente en el municipio de Frontera Comalapa corresponde a restos óseos prehispánicos con una antigüedad de casi mil años, señaló la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

 

En un comunicado, dio a conocer que los resultados surgieron del análisis de peritos forenses en coordinación con especialistas en materia antropológica.

 

En este sentido, los especialistas explicaron que los cráneos presentan diversas deformidades causadas por costumbres de la época.

 

Por su parte, el delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Chiapas, Emiliano Gallaga Murrieta, apuntó que el hallazgo presenta características de un cementerio prehispánico de finales del Clásico Tardío y principios del Posclásico (700-800 a 1100-1200 D.C.).

 

Asimismo, analizaron la ubicación y formaciones en que fueron encontradas las osamentas, así como la tonalidad de las estructuras óseas y de las paredes internas de la cueva dadas por la temporalidad.

 

En el lugar de los hechos, ubicado al interior de la Ranchería Nuevo Ojo de Agua en el municipio de Frontera Comalapa, fueron ubicadas también diversas piezas de barro de origen prehispánico.

 

Peritos especialistas en materia forense de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) explicaron que hallaron cráneos completos y fracturados, así como fémures, tibias, mandíbulas y maxilares.

 

Las osamentas son analizadas en el Servicio Médico Forense de la PGJE con el apoyo de especialistas en Antropología Física para determinar con precisión el sexo, edad de cada uno y antigüedad de su muerte.

 

En estas acciones participa personal de la PGJE, de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), Protección Civil y del Ejército Mexicano.