El alza de algunos productos agropecuarios, alimentos y energéticos durante los primeros 15 días de 2012 presionaron para que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se incrementara 0.32%, reportó el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI).

 

Los precios al consumidor en la primera quincena del año aumentaron casi el doble, respecto a igual periodo de 2011, cuando el indicador repuntó apenas 17%.

 

De acuerdo con el organismo, ello provocó que la tasa de inflación general se ubicara en 3.94%, lo cual casi sobrepasa al nivel proyectado por Banco de México (Banxico) de 3%, pero con un margen de 1% +/-.

 

Para la primera quincena de 2012, los productos con precios al alza que incidieron sobre la inflación general fueron la tortilla de maíz, los automóviles, el tomate verde, el pollo, productos de loncherías, fondas, torterías y taquerías, así como la carne de cerdo, la electricidad, el pan dulce, el huevo y el gas doméstico LP, indicó INEGI.

 

Añadió que las mercancías con precios a la baja con una incidencia sobre la inflación son los servicios turísticos en paquete, el transporte aéreo, el servicio telefónico local fijo, la ropa de abrigo, la papaya, la uva, el limón, la papa y otros tubérculos, así como la cebolla y el gas doméstico natural.

 

Las localidades donde el INPC registró variaciones extremas, respecto al promedio nacional en la primera quincena del año están: Tulancingo, Hidalgo; Iguala, Guerrero; Chetumal, Quintana Roo; Colima; San Andrés Tuxtla y Veracruz, Veracruz; Torreón, Monclova y Ciudad Acuña Coahuila, así como Monterrey, Nuevo León.

 

El resultado general de inflación es moderadamente negativo, frente al alza de 0.26% esperada por el mercado, comentó Gustavo Hernández, analistas de Scotiabank.

 

Explicó que destacan las presiones que mantienen los componentes de alimentos sobre la inflación subyacente, y de la misma manera, los precios de frutas y verduras han observado incrementos en las últimas cinco quincenas.

 

Con este resultado, “la inflación anual pudiera superar 4% para los próximos meses”, añadió el especialista en un reporte sobre la inflación en la primera quincena de enero.

 

El incremento en distintos renglones de bienes comerciables sugiere que hay un impacto derivado de la depreciación del tipo de cambio, aunque todavía no se percibe una “contaminación” hacia el componente de servicios, indicó el economista.

 

A su vez, BBVA Research señaló que las mercancías no alimentarias crecerán moderadamente, porque el inicio de la temporada de rebajas compensará parcialmente los efectos del tipo de cambio.

 

Por su parte, los precios de los alimentos procesados seguirán reflejando las presiones del mercado del maíz nacional. Sin embargo, probablemente se reducirán en términos anuales por el efecto estadístico relacionado con el aumento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a los tabacos en la primera quincena de 2010, añadió el área de análisis económico del banco español.