Seúl.El líder norcoreano, Kim Jong-il, ha fallecido, informó hoy la televisión estatal del país comunista, KCTV.

 

Kim murió el pasado sábado 17 a las 08.30 hora local (23.30 GMT del viernes) a causa de “fatiga física” durante un viaje en tren, según un despacho de la cadena norcoreana recogido por la agencia surcoreana Yonhap.

 

De las últimas presentaciones políticas de el líder norcoreano, Kim Jong-il, fue cuando hizo una visita oficial a Rusia, donde se entrevistó con el presidente Dmitri Medvédev, en Buratia, una de las repúblicas que forman la Federación Rusa, y le aseguró que estaba dispuesto a reanudar las conversaciones a seis bandas. Fue cuando Corea del Norte confirmó su disposición a retornar sin condiciones previas a la mesa de negociaciones para resolver el asunto de la implantación de una moratoria” a la fabricación de armas nucleares y a sus pruebas, como señalaba en ese entonces Natalia Timakova, portavoz de Medvédev.

 

Kim Jong-il, de 69 años, había sufrido una apoplejía en agosto de 2008 y desde entonces había numerosos rumores sobre su estado de salud.

 

El líder norcoreano, Kim Jong Il, era el heredero de la primera dinastía comunista tras la muerte de su padre y fundador del país, Kim Il Sung.

 

En 1998, cuatro años después de la muerte de su padre, la Asamblea Nacional de esta nación asiática, a la que mantiene como la más hermética del mundo, le otorgó todos los poderes.

 

La República Popular Democrática de Corea vive bajo los designios de su “amado líder”, la representación más genuina del comunismo encarnado en el pensamiento único y la filosofía del que era el “juche”, basada en la autosuficiencia, que sigue siendo hoy día la piedra angular de la ideología política del país.

 

Al parecer, el líder norcoreano nació el 16 de febrero de 1942, pero también hay quienes afirman que fue en 1946 en las laderas del monte norcoreano de Paektu, la montaña sagrada donde residió el legendario fundador de la península coreana, Tangún.

 

Para otros expertos en asuntos coreanos, Kim Jong Il nació en la ciudad soviética siberiana de Wyatsku, donde figura con el nombre de Yuri Ilsungyevichi Kim y donde su familia se encontraba refugiada durante la II Guerra Mundial.

 

Pese a la tímida apertura exterior del régimen comunista en estos últimos años -en especial por las presiones que recibe el país a causa de su política nuclear- la vida privada de Kim era tan secreta como fue la de su padre.

 

El clan de los Kim siempre despertó curiosidad dadas las peculiaridades que rodean a una familia que, desde la fundación del país en 1948, ejerce el poder absoluto en la nación norcoreana.

 

Sin embargo, la personalidad del “amado líder” quedó marcada cuando en su infancia vivió dos hechos trágicos: la muerte de su hermano menor ahogado mientras jugaban juntos en una piscina, en 1948, y el fallecimiento de su madre cuando Kim tenía seis años. Al parecer, ésta se suicidó, pero nunca se ha podido demostrar.

 

El culto a la personalidad de Kim Jong Il es similar al de su padre en cuanto a que se le ve rodeado de militares del Ejército, en las sedes oficiales de la prensa y la proliferación de imágenes de su persona en televisión, pero nunca apareció con la ostentación de medallas que cualquier jefe militar norcoreano luce con gran pompa.

 

Los más allegados a su persona afirman que fue expulsado de la Academia militar del Aire de la antigua Alemania del Este por mal estudiante, luego regresó a Pyongyang graduándose en 1964 en Ciencias Políticas y Económicas, en la universidad que lleva el nombre de su padre, con altas calificaciones.

 

En 1982 fue elegido el diputado más joven del país, ostentaba un sinfín de cargos, a la vez que una gran influencia en la cúpula militar que, según expertos en la región, es su auténtica base de poder.

 

Una personalidad, basada según sus biógrafos, en un carácter irascible, inestable, inseguro, ciclotímico e impredecible, pero siempre recibiendo el máximo respeto y sumisión de todos sus ciudadanos, que desconocen todo lo que ocurre fuera del país, como la “guía de la luz” para todos los norcoreanos.

 

Hay quienes afirman que tenía cuatro hijos, pero también se dice que no tenía ninguno. Lo mismo ocurre con el número de esposas que oscila, según los biógrafos, de una a varias, y existe incluso la versión de que está soltero.

 

Kim Jong Il, el último líder estalinista del mundo, según sus detractores, usa un doble que aparece en actos públicos para evitar ser víctima de atentados. Saber lo que pasa dentro de su cerebro era un enigma, afirman quienes lo conocieron.

 

Era un autor prolífico, con más de 40 libros publicados, además de un enamorado del cine con una videoteca de miles de películas, entre las que destaca ‘Viernes 13’, uno de los mayores éxitos comerciales del cine de terror norteamericano de los años 80.

 

Su personalidad, también radicada en su pelo desaliñado y su baja estatura (1,64 centímetros), le conviertían, según sus allegados,  en una persona llena de misterio y propenso a numerosas conjeturas, añaden expertos en asuntos coreanos, quienes afirman que solía usar plataforma para superar su escasa altura.

 

El líder norcoreano fue acusado de estar implicado en el atentado con bombas en 1983 en la antigua capital de Birmania (Myanmar), Rangún, que mató a 21 surcoreanos, entre ellos cuatro ministros, y también de pertenecer al comando que en 1974 mató a varios soldados estadounidenses en un puente de la zona fronteriza de Panmunjom.

 

Sus pocos viajes al exterior, en especial a China y Rusia, estuvieron rodeados de misterio y sorpresa ante la falta de noticias. Además viaja siempre en tren porque tiene miedo al avión.(Con información de EFE)