BEIRUT. La Liga Árabe aprobó ayer sanciones económicas contra Siria para presionar al régimen del presidente Bashar Assad a que cese su violenta represión contra la sublevación popular iniciada hace ocho meses, en un paso sin precedentes contra un país árabe.

 

Las sanciones abarcan un amplio rango de instituciones y altos cargos, aunque la Liga Árabe expresó su esperanza en que afecten lo menos posible a la población civil.

 

El Consejo del organismo prohíbe desde ahora a altos cargos sirios viajar a los países árabes y ordenó que se congelen sus fondos.

 

Además, la Liga Árabe decretó el cese de los intercambios comerciales y financieros con el Gobierno de Siria -con excepción de las mercancías necesarias para la población-, así como el de las transacciones con el Banco Central Sirio.

 

Asimismo, se prohibirán los vuelos entre los países árabes y Siria, una decisión que todavía requerirá de los ajustes que introduzca el Comité Ejecutivo Técnico de la Liga en el plazo de una semana.

 

Este mismo comité, integrado por expertos de Jordania, Argelia, Arabia Saudí, Omán, Egipto y Marruecos, deberá estudiar también cuáles son los bienes que no quedan incluidos en el embargo.

 

Antes de la votación, Damasco criticó la medida como una traición a la solidaridad árabe.

 

En una conferencia de prensa en El Cairo, el canciller de Qatar Hamad bin Jassim dijo que 19 de los 22 países miembros de la organización aprobaron las sanciones.

 

“Buscamos evitar sufrimiento el pueblo sirio”, dijo bin Jassim.

 

Las sanciones son las más recientes en una creciente ola de presiones internacionales para poner fin a la represión en Siria, que la ONU dice ha matado a más de tres mil 500 personas desde marzo.

 

La Unión Europea y Estados Unidos han impuesto varias rondas de sanciones contra Assad y su régimen, entre ellas la prohibición de importar petróleo sirio.

 

El secretario general de la Liga Arabe, Nabil Elaraby, dijo que el bloque reconsiderará las sanciones si Siria implementa un plan de paz auspiciado por países árabes que incluye retirar los tanques de las calles y la aceptación de observadores internacionales en el país.

 

“Llamamos a Siria a implementar rápidamente la iniciativa árabe”, dijo.

 

El periódico estatal sirio Al-Thawra publicó un artículo de primera plana ayer en el que dijo que la Liga Arabe estaba pidiendo sanciones económicas y comerciales contra el pueblo sirio. Dijo que la medida no tenía precedentes y “contradice las reglas de cooperación árabe”.

 

Desde el inicio de la sublevación el gobierno sirio ha culpado a pandillas armadas y conspiradores extranjeros por el derramamiento de sangre.

 

No estaba claro si las sanciones árabes conseguirán presionar al régimen sirio a poner fin a la violencia que ha matado a decenas de sirios cada semana. Muchos temen que la violencia está empujando al país a la guerra civil.

 

Hasta hace poco, la mayoría de los derramamientos de sangre fueron causados por fuerzas de seguridad que disparaban contra manifestaciones pacíficas. Recientemente, sin embargo, ha habido reportes de desertores del ejército y civiles armados que se están enfrentando con las fuerzas de Assad.