La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) reiteró hoy que deja las puertas abiertas a México para que participe en la Copa Libertadores, pese a la decisión que tomó este viernes el presidente de la Liga MX, Enrique Bonilla, de no intervenir en la edición 2017 del torneo sudamericano.

 

“Las puertas siguen abiertas y una vez recibamos la propuesta detallada sobre el año sabático que propone el señor Bonilla, analizaremos su conveniencia de forma juiciosa en el Consejo Ejecutivo“, declaró el presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez, según un comunicado publicado en la página web de la organización.

 

Los cambios en el calendario de la Libertadores, que se pretende jugar de febrero a noviembre de 2017, afectarán a las competiciones en México, que al coincidir con fases decisivas tendría que recurrir a cuadros alternativos para cumplir en ambas competiciones.

 

Domínguez puntualizó que las modificaciones en el calendario obedecen a una estrategia integral para mejorar sustancialmente los torneos de clubes en la región.

 

“Por mucho tiempo, los clubes han tenido el dilema de tener que elegir entre ser competitivos en sus torneos locales o en los continentales. Nuestra propuesta de un calendario anual permitirá, por primera vez, que los clubes puedan competir a un alto nivel en ambas instancias”, detalló.

 

Agregó que el cambio fortalecerá la calidad de las competencias en cada país, beneficiará al fútbol a nivel regional, y facilitará una mejor organización logística, con menos estrés para los jugadores, y una mejor programación televisiva para los aficionados.

 

La decisión parte de un análisis técnico sobre los factores que le restan competitividad al fútbol regional, como la falta de estándares en la calendarización, la organización logística, la gestión deportiva, infraestructura y experiencia en los estadios, entre otros, según la Conmebol.

 

Domínguez explicó que, tras la presentación del nuevo calendario, mantuvo reuniones con varias asociaciones de fútbol de diferentes países para resolver sus inquietudes, entre ellas con la Liga MX.

 

En octubre, el presidente de la Conmebol se reunión con Bonilla para analizar la propuesta presentada, pero finalmente el fútbol mexicano resolvió no estar presente en la competición el próximo año.

 

Domínguez agradeció la buena disposición de Bonilla en el proceso de diálogo y el apoyo de los aficionados a la participación de México en el torneo sudamericano, y dijo que espera seguir trabajando con México por el mutuo interés de promover el desarrollo del fútbol en las Américas.

 

Jugadores, entrenador y dirigentes del fútbol mexicano coincidieron este jueves al calificar como un retroceso para el balompié local su posible salida de la Copa Libertadores a partir de 2017 por conflictos en el calendario.

 

 

OR