En un operativo sorpresa, elementos del Ejército detuvieron a 34 policías comunitarios, en el municipio de Buenavista Tomatlán, en Michoacán. Portaban armamento de uso exclusivo de las fuerzas armadas.

 

Anoche, en conferencia, el gobierno federal dio a conocer que existen vínculos entre este grupo comunitario con la delincuencia organizada, debido al tipo de armamento que portaban. Específicamente con el Cártel de Jalisco Nueva Generación.

 

El subsecretario de Normatividad y Medios de la Secretearía de Gobernación, Eduardo Sánchez, informó que en total se les decomisaron 47 armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, de las cuales 32 son largas y 15 cortas. Entre el armamento destacan fusiles AK-47, AR-15 e incluso pistolas calibre 5.7, conocidas como matapolicías.

 

El funcionario fue enfático en afirmar que “este gobierno no negocia la ley, sino la aplica”.

 

Las líneas de investigación, indicó Sánchez, apuntan a que este grupo fue armado y, posiblemente, entrenado por las células del CJNG que operan en los estados de Jalisco, Michoacán y Colima.

 

Por su parte, la subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales de la PGR, Mariana Benítez, informó que la mayoría de las personas detenidas son hombres, de los 16 a los 32 años de edad, entre ellos dos con antecedentes penales.

 

Explicó que ayer por la tarde, los detenidos fueron trasladados a las instalaciones de la SEIDO, donde rendirán declaración preparatoria y se definirá su situación jurídica. El armamento quedó bajo resguardo de la Sedena.

 

Juicio del pueblo

 

En Michoacán, Jesús Reyna García, encargado del despacho de la gubernatura, ante la ausencia de Fausto Vallejo, informó que el operativo castrense se llevó a cabo después de que integrantes de la supuesta guardia comunitaria anunciaron un juicio público contra el director de la Policía municipal, Otoniel Montes Herrera, y otros cinco agentes, retenidos por la propia brigada desde el pasado fin de semana.

 

Y ante la sospecha de que en las llamadas policías comunitarias se infiltraron integrantes del crimen organizado, según informes de la PGR, la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena) incrementó la presencia militar en los municipios michoacanos de Buenavista y Tepalcatepec.

 

El Cártel de Jalisco Nueva Generación, liderado presuntamente por Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, es el grupo delictivo que supuestamente infiltró las guardias comunitarias.

 

Crean otra fuerza

 

Por otra parte, ante la inseguridad, pobladores de Pamatácuaro, municipio de Los Reyes, ubicado a 55 kilómetros de Uruapan, advirtieron que crearán su propia policía comunitaria.

 

Demandan una Base de Operaciones Mixtas para vigilar y atender la alta incidencia de saqueos de los recursos forestales de su comunidad.

 

De hecho, los pobladores ya instalaron un retén para intentar tener el control y evitar que continúe la comisión de delitos.

 

Alfredo Reyes Martínez, comunero de Pamatácuaro, se llevarán a cabo pláticas con funcionarios estatales para poder obtener el compromiso de las autoridades para resguardar los recursos naturales.

 

Sin embargo, advirtió, en caso de que en los próximos días no se concrete el respaldo del gobierno, los pobladores convertirán el retén en una guardia comunal.

 

El miércoles por la noche, las personas que mantiene el retén retuvieron a cuatro personas en la cárcel comunal, luego de que fueron sorprendidas incendiando un predio de aproximadamente 11 hectáreas, presuntamente para el inicio de un cultivo.

 

Hasta el cierre de esta edición, la liberación de las personas se encontraba sometida a votación de la asamblea comunal, instaurada como máximo órgano de gobierno en el probado.

 

Infiltra CDNG autodefensas

 

La detención de miembros de grupos de autodefensa de Buenavista, Michoacán, se debió a que presuntamente se trata de infiltrados del crimen organizado.

 

De acuerdo con fuentes gubernamentales, se trata de integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes aprovecharon la revuelta popular del pasado 24 de febrero, para tratar de apoderarse del movimiento surgido contra los llamados Caballeros Templarios, su enemigos naturales.

 

Los detenidos fueron puestos a disposición del Ministerio Público de la Federación en Apatzingán, pero debido a su peligrosidad, los trasladaron a las oficinas centrales de la PGR en Morelia, y de ahí a la Ciudad de México.

 

Las policías Federal y Federal Ministerial, en coordinación con el Ejército mexicano, montaron un operativo para el traslado de los integrantes del CJNG.

 

La presencia militar se incrementó los últimos días en Buenavista y Tepalcatepec, ante versiones de que las autollamadas policías comunitarias fueron infiltradas por el grupo delictivo procedente de Jalisco.