Verse subastado por grandes equipos a los cuarenta años, es un logro que quizá ningún otro futbolista antes de Gianluigi Buffon había conseguido.
En un contexto en el que lo habitual es que incluso a partir de las tres décadas de edad comiencen las suspicacias, los contratos de corta duración, la disminución de ofertas y confianza, Buffon continúa rompiendo paradigmas.
Siendo la posición de portero la más dada a longevidad, con él incluso ha llegado a niveles más deslumbrantes de duración: casi veinte años perteneciendo, ininterrumpidamente, al listado de los cinco mejores arqueros del planeta.
Suele suceder que quien pronto aparece, también pronto se hastía y sale del primer plano deportivo. Caso muy diferente, Gigi debutó en Serie A en el muy lejano 1995, cuando apenas pasaba de los 17 años. Desde un principio con iguales cuotas de talento y personalidad, a los 20 años ya acudía a la Copa del Mundo de Francia 98 y a los 21 ya era el guardameta más caro de la historia al pagar la Juventus por él 52 millones de euros.
Curioso destino, Buffon partía como figura primordial para la Eurocopa 2000, visto ya como uno de los mejores atajadores del orbe. A pocos días del certamen y en el último partido amistoso, la caída de apariencia más inofensiva le propició una lesión: el niño prodigio se perdía el torneo.
La opinión pública italiana le consoló insistiendo que era muy joven, que su momento en el arco azzurri iba a llegar…, y de qué forma: no pasaría un año, entre 1997 y 2018, sin que Buffon iniciara al menos un cotejo con su selección, hasta convertirse de lejos en quien más veces ha portado esa casaca.
Tras Brasil 2014 se especuló su retirada, misma que con 36 años desestimó. Lo mismo luego de la Eurocopa 2016, ya con 38 cumplidos. Ahora, consumado el fracaso italiano para meterse a Rusia 2018, Buffon ha confirmado su adiós a la Nazionale y también que deja a esa Juventus de la que no huyó cuando tocó jugar en Serie B y regresar a primera categoría.
Lo sorprendente no es sólo eso, sino que Gigi disponga de ofertas para continuar jugando en la élite europea rumbo a una temporada en la que cumplirá 41 años. Se habla de París Saint Germain, Real Madrid, Liverpool, más allá de las obvias súplicas que le llegarán desde ligas como la china, estadounidense o qatarí.
¿Por qué se le busca? Primero, por lo que sigue siendo: un seguro bajo los tres postes, un líder positivo que todo colectivo quisiera tener, un cuarentón que, como nadie antes, se conjuga en presente. Segundo, porque ser parte de una carrera legendaria como la de Buffon es demasiado apetecible para los departamentos de mercadotecnia de muchos gigantes del continente.
Gianluigi, al que se vio jubilado desde los 35 años, medita con seguir más allá de los 40. No mintieron quienes le consolaron tras la lesión del año 2000, a días de la que sería su primera Eurocopa: sus días de gloria iban a llegar y serían demasiados.
Twitter/albertolati