WASHINGTON. El índice de precios al consumidor (IPC) de Estados Unidos subió un 0.3 por ciento en junio, empujado sobre todo por la gasolina, según informó hoy el Departamento de Trabajo.

 

Después de un incremento del 0.4 por ciento en mayo, la mayoría de los analistas había calculado un aumento del 0.3 por ciento en junio. En un año el IPC ha subido un 2.1 por ciento.

 

Si se excluyen los precios de alimentos y energía, que son los más volátiles, la inflación subyacente en el IPC de junio fue del 0.1 por ciento.