“Oaxaca es una de las lovemarks que mayor nivel de lealtad y confianza perciben los turistas; en cuanto los visitantes se despiden de Oaxaca, un gran porcentaje regresa y transmite el amor por esta marca-destino de boca en boca”, así lo dice Saymi Pineda, Secretaria de Turismo de la entidad que gobierna Salomón Jara.

 

Desde su posición como Secretaria de Turismo, Saymi Pineda, creo yo, ha estado muy activa desempeñando un papel fundamental en el renacimiento turístico de Oaxaca.

Su enfoque centrado en el potencial emocional de la región ha resonado profundamente, convirtiéndola en una embajadora persuasiva de las ocho regiones que componen este destino único.

 

El impacto de Pineda se refleja en cifras tangibles: más de 5 millones de turistas el año pasado y una derrama económica de 18 mil 797 millones de pesos al cierre de 2023.

Los datos duros reportan una ocupación hotelera promedio de 40.78%, un incremento del 10% del arribo de turistas, así como la recepción de 31 embarcaciones con 52 mil 689 pasajeros, lo que generó una derrama económica aproximada a los 62 millones 488 mil pesos.

 

Un indicador clave de crecimiento referido es la movilidad aérea, con un acumulado de 13 mil 700 frecuencias de vuelos nacionales e internacionales, un 15% más que en 2022, con un total de 3 millones 201 mil 962 personas atendidas.

 

Uno de los pilares de su visión es la conectividad. Con múltiples aerolíneas y rutas aéreas, Oaxaca nunca ha estado tan accesible. Además, los esfuerzos de reestructuración en el Aeropuerto de Puerto Escondido prometen una experiencia aún más cómoda para los visitantes.
La apuesta de Pineda por la gastronomía local también es notable. Con la aspiración de ingresar a la Guía Michelin, Oaxaca busca atraer a los amantes de la buena comida, destacando su riqueza culinaria como parte integral de su identidad cultural.

 

Eventos emblemáticos como la Guelaguetza no solo celebran la cultura oaxaqueña, sino que también sirven como imán para turistas de todo el mundo, seducidos por la autenticidad y la calidez de la región.

En una exhibición sin precedentes durante el Tianguis Turístico de México 2024 en Acapulco de Juárez, Guerrero, Oaxaca se erigió como el epicentro de atención con un imponente stand de 378 metros cuadrados, el más grande en su historia.

 

Este destacado evento turístico fue testigo de múltiples galardones otorgados a Oaxaca, incluyendo reconocimientos como el de “Mejor estado para saborear y descubrir su cocina tradicional y ancestral” y el honor a La Guelaguetza como “Mejor celebración ancestral para conectar con nuestras raíces”.

 

Durante el Tianguis Turístico, se destacaron los principales destinos turísticos del estado, la reactivación de las Rutas Turísticas, seis Pueblos Mágicos, el afamado Barrio de Jalatlaco, zonas arqueológicas, áreas naturales protegidas y la exquisita gastronomía oaxaqueña.

 

El Tianguis fue también una plataforma clave para impulsar el turismo de negocios y promover proyectos como el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), vital para el desarrollo comunitario y económico de la zona.

En días pasados, Oaxaca finalizó su participación en una gira en Francia y Turquía con el objetivo de fortalecer la presencia de la entidad en el mercado internacional y asegurar la permanencia del turismo europeo y asiático en los destinos turísticos.

 

Derivado de esta gira, representantes de turoperadoras y medios de comunicación de Francia y Turquía viajarán en los próximos meses a Oaxaca para conocer la oferta turística de la entidad y promoverla a nivel internacional.

 

Con este enfoque, Oaxaca sigue ofreciendo una combinación única de cultura, naturaleza, gastronomía y hospitalidad.

 

Ojalá Saymi Pineda no baje los brazos y cada vez más se tome como bandera el turismo como el motor de Oaxaca y eso coadyuve de manera decidida a menguar en buena medida los niveles de pobreza de dicha entidad.