El registro de Claudia Sheinbaum como candidata presidencial oficialista no opacó la información surgida de la concentración por la democracia realizada ayer en la Plaza de la Constitución.

 

Y no lo hizo no porque el evento en sí no fuera importante, sino por los yerros que los gobiernos federal y capitalino cometieron para boicotear o minimizar el efecto de la concentración.

 

De entrada, nuevamente la bandera nacional no fue izada en la asta monumental del Zócalo; es la segunda ocasión que en una concentración ciudadana el gobierno decide que la bandera no se ondeé.

 

También el hecho de que los accesos al Zócalo, excepto dos, estuvieran cerrados “por el paseo ciclista’’ fue tomado como otro intento por descarrilar o reducir el número de participantes en el evento ciudadano.

 

Hubo, desde luego, también diferencias enormes entre los discursos de Sheinbaum y Lorenzo Córdova.

 

La primera ofreció continuar “con la transformación’’ pero se dio tiempo también para criticar a quienes participaron en la movilización.

 

Sheinbaum habló de un país en paz, sin discordia, muy distinto al que se percibe con solo salir a la calle o leer los medios de comunicación.

 

El registro no fue la fiesta guinda que se esperaba en el INE; el discurso no levantó y la asistencia fue menor a la esperada, tal vez porque se precipitó la celebración del evento.

 

Del otro lado se vio más entusiasmo; el discurso de Córdova fue un resumen de todos los intentos lopezobradoristas por atacar a las instituciones electorales y a la propia Constitución.

 

No hay voto libre si se condiciona al pago de los programas sociales, no hay voto libre si interviene el gobierno, no hay voto libre si hay intimidación de la delincuencia organizada, no hay voto libre si se siguen otorgando dádivas para favorecer a cualquier coalición.

 

La de ayer fue la última demostración del músculo ciudadano antes de la elección.

 

Pero la hora de la verdad será el 2 de junio en las urnas.

****

La Fiscalía General de la República (FGR) exhortó a Celso Ortega Martínez, líder de “Los Ardillos’’, a que presente pruebas de sus dichos sobre el financiamiento del narcotráfico a la campaña presidencial de López Obrador en el 2006.

 

Ortega Martínez declaró a los reporteros de Latinus, que él mismo operó para López Obrador en el 2006, que se reunió varias veces con un enviado de Félix Salgado Macedonio, padre de la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, y que tenía compromisos con la actual alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, que ésta no cumplió.

 

La petición de la FGR desmiente la declaración de López Obrador que dijo que la entrevista con Ortega había sido “un montaje’’.

 

Si quieren encontrar a Ortega, bien le podrían preguntar a Otilia por donde andará su cuate porque él desde luego que se parará en la FGR a “presentar’’ sus pruebas.

****

La Cooperativa de la Cruz Azul, que preside Víctor Velázquez, suscribió con el IMSS un convenio que le permite participar en los Foros Promocionales de Prevención en Seguridad y Salud en el Trabajo.

 

Por medio de estos foros, representantes del Seguro Social presentan el programa Entornos Laborales Seguros y Saludables (ELSSA), cuya función es ofrecer información para la prevención de enfermedades y accidentes.

 

Armando Vargas, gerente general de la Planta Hidalgo de la Cooperativa, destacó el papel de la formación continua, la conciencia sobre la seguridad y la participación de los trabajadores y colaboradores para la creación de una cultura de organización que priorice salud y seguridad.

 

Sin duda una buena iniciativa.

 

     @adriantrejo