La diferencia es mucha.

 

La candidata oficial Claudia Sheinbaum viaja por el país, habla con todos los actores políticos y se ha dedicado a armar su estructura electoral.

 

Tiene una gran ventaja: atrás de ella está como jefe de campaña el Presidente de la república, todos los días hace campaña y la respaldan los gobernadores del régimen.

 

Y por si fuera poco, se han disciplinado los dirigentes -y lo más importante: han disciplinado sus finanzas- de los tres partidos alineados desde Palacio Nacional, Morena, el Verde y el PT.

 

Mientras tanto, durante estos meses, la opositora Xóchitl Gálvez organiza eventos acotados con organizaciones civiles, dialoga con empresarios, viaja al extranjero, hace denuncias y pide observadores.

 

No cuenta con estructuras propias aunque, al menos en el acuerdo base de la alianza Fuerza y Corazón por México, dispone de los tres partidos políticos y de sus cabezas Alejandro Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano.

 

EL DINERO MANDA

 

Hay otro dato clave.

 

Claudia Sheinbaum tiene operadores para todo y en todos lados, desde la sede del Poder Ejecutivo hasta el último poblado a donde llegan los programas sociales pagados con nuestros impuestos.

 

No tiene limitaciones económicas para dialogar, comprometer cargos y paga, y firmar acuerdos con doble garantía: el dinero generoso actual y el posible ante su probable triunfo electoral.

 

Así se ejercen el poder y el presupuesto.

 

En cambio, Xóchitl Gálvez ha formado su equipo de trabajo con retazos de aquí y de allá, mayoritariamente espontáneos y sin garantía de paga alguna, pero tampoco con garantía de lealtad.

 

Sólo así se explica el envío a viajes internacionales mientras aquí PAN, PRI y PRD deciden las candidaturas regionales -gobernadores, senadores, diputados locales y federales, alcaldes- con quienes debería forjar sinergia hacia las elecciones de junio.

 

Cuento aparte son los deslices: hablar un inglés y tomarse fotos con políticos blanco del régimen como Felipe Calderón, se presta para el escarnio de López Obrador, Claudia Sheinbaum y su aparato mercadológico.

 

MC EN 3 ESTADOS

 

1.- A Fernando Morales le dan risa las encuestas.

 

Es a la vez dirigente de Movimiento Ciudadano (MC) y candidato a gobernador de Puebla, pero algunas firmas demoscópicas le otorgan sólo uno por ciento de intención de voto.

 

Por ello mandó hacer una encuesta (IPM Estratégica) y antes de iniciar campaña le da un piso de 13 por ciento de voto efectivo sobre 33 del morenista Alejandro Armenta y 20 del panista Eduardo Rivera.

 

Con un dato: 49 por ciento no revela sus preferencias.

 

-Por supuesto que voy a remontar. Ahí está la veta de las urnas. Estoy llamado a dar vida a MC y así habrá emecismo en Jalisco, Nuevo León y Puebla… y no veo dónde más.

 

Y 2.- En Las Vegas habrán ganado los Jefes de Kansas City, pero en México el consorcio TelevisaUnivision se llevó la gloria de los aficionados con 16.8 millones, casi dos tercios de aparatos sintonizados.

 

Y en Estados Unidos el fenómeno habrá sido Taylor Swift, pero aquí el Super Bowl tuvo a los Tres AmigosToño de Valdés, Enrique Burak y Pepe Segarra– como voz e imagen de ese ícono deportivo.

 

Con estos datos viene la novedad: TelevisaUnivision se ha declarado como “la casa de la NFL”.

 

      @urenajose1

Las opiniones expresadas por los columnistas son independientes y no reflejan necesariamente el punto de vista de 24 HORAS.