La cantante de pop Taylor Swift arribó este sábado 10 de febrero a Estados Unidos, procedente de Japón, en donde tuvo un concierto.
De acuerdo con el portal TMZ, la cantante aterrizó en la ciudad de Los Ángeles, California, luego de tomar un jet privado desde Tokio, donde había ofrecido uno de los conciertos de su gira “The Eras Tour”.
El sitio web publicó una fotografía algo borrosa de la artista, cubierta por un paraguas azul claro, mientras subía a un todoterreno que formaba parte de una caravana de vehículos de estilo presidencial.
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La llegada acabó con las especulaciones en las redes sociales sobre el paradero exacto de Swift. Usuarios de Internet que rastrean vuelos en X (antes Twitter) publicaron actualizaciones periódicas sobre el estatus de un avión que se creía que transportaba a Taylor Swift y que despegó de Tokio este sábado.
La aeronave, bautizada como “Football Era” en el sitio web Flightradar24, aterrizó en Los Ángeles este sábado por la tarde. En tanto, otros internautas apostaban a que Swift viajaba en un avión diferente.
Por su parte, Gracie Hunt, hija del presidente de los Kansas City Chiefs, Clark Hunt, apenas podía contener su emoción por la inminente llegada de la cantante, de 34 años.
“¡Ya viene! ¡Ya viene! Estamos emocionados”, dijo Gracie en un evento en Las Vegas, una ciudad que ha vivido una semana de locura previa al choque del Super Bowl LVIII entre los Chiefs, vigentes campeones de la NFL, y los San Francisco 49ers.
Aprovechando la diferencia horaria, el vuelo de unos 8 mil 900 kilómetros le permitió a Taylor Swift llegar a Los Ángeles con tiempo suficiente para trasladarse a Las Vegas antes del inicio del juego del domingo, para apoyar a su pareja, el jugador de Kansas City, Travis Kelce.
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El romance entre este ícono actual de la cultura pop y Travis Kelce ha cautivado a los aficionados esta temporada y se estima que ha generado un fuerte aumento de la audiencia femenina en los partidos de los Chiefs.
Swift ha acudido regularmente a ver los juegos de Kelce desde palcos privados de los estadios. Su aparición en el Super Bowl del domingo en la capital del juego podría impulsar un récord de audiencia televisiva para la gran final de la NFL, el mayor acontecimiento del calendario deportivo estadounidense.
EAM